¿Así se siente el amor?

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El aroma a café recién hecho llenaba la pequeña cafetería, donde los rayos del sol se filtraban por las ventanas, creando un hermoso juego de luces y sombras en el suelo de madera. Miranda solo estaba sentada en su mesa habitual junto a los grandes ventanales de la cafetería, absorta en su libro, cuando el suave sonido del timbre de la puerta anunció la llegada de alguien.

Levantar la vista fue casi un impulso para ella. Allí, parado en la puerta principal, estaba él, por un segundo pareció que el mundo se detuvo en un instante, el joven solo apreció un poco la cafetería y se dirigió a pedir un café. Miranda solo podía apreciarlo, le parecía linda su sonrisa, era tan cálida. Miranda fue sacada de sus pensamientos por el joven,  tuvieron una corta charla, al final cuando terminaron de tomar su café decidieron dar un paseo para hablar mejor, en el camino solo hablaron de cosas triviales.

Miranda

En todo el paseo solo pude concentrarme en su cálida sonrisa, emanaba tranquilidad y felicidad, todo sobre él me agradaba, su carisma, su cara, todo. Al terminar el paseo él se tenía que ir por temas de trabajo, yo le dije que no tenía problema.

Antes de que Miranda dejara ir al joven, gritó a todo pulmón:

Miranda: "¿CÓMO TE LLAMAS?"

El joven solo volteó y alcanzó a decir:

?????: "JESÚS"

Miranda, al escuchar el nombre de aquel joven, solo pudo sentirse feliz.

Ya Miranda en su casa solo podía pensar en aquel joven, absorta en sus pensamientos, en el recuerdo de la sonrisa de ese joven.

Por otro lado, Jesús en su trabajo solo podía pensar en esa chica, en sus hermosos ojos, esos ojos perlados color verde, se sentía un completo estúpido al no preguntarle su nombre en toda la charla que tuvieron, por lo menos tenía seguro que la podría ver al siguiente día en la cafetería, cada que Jesús pensaba en esa chica solo sentía su pecho arder, llenarse de una presión cálida en el pecho, una sensación hermosa la cual se le quedó la mayor parte del día.

Jesús

Como terminé todo mi trabajo, me pude ir a mi casa temprano, era raro que mi jefe nos dejara salir temprano, seguro está de buenas el hijo de puta. Caminando por un buen rato, me fijé en que había una florería, pensé en la chica de hoy en la mañana y mi corazón casi se sale de mi pecho, así que le compré unas hermosas margaritas. Ya llegando a mi casa después de comprar las flores, las dejé en agua y me fui a descansar, solo esperaba que mañana pueda ver a esa hermosa chica otra vez, quiero volver a sentir esa felicidad al ver sus hermosos ojos, su risa, su cara.

SIGUIENTE DÍA

Jesús despertando calmadamente con el sonar de su despertador, rápidamente agarro el despertador y lo tiro contra la pared, destruyendo al mismo. Jesús ya preparado y con las margaritas en mano se fue directo a la cafetería, ya llegando a esta solo pudo ver a la misma hermosa chica de ayer, su corazón al verla solo pudo latir con mas fuerza,  después de entrar y pedir su café, directamente fue a hablar con la chica.

Jesús: "Hola, nos volvemos a ver."

Miranda: "Hola de nuevo, pensé que ya no te podría ver."

Jesús: "Me tendrás que aguantar un tiempo más."

Miranda: "Me parece bien, ¿esas flores para quién son?"

Jesús: "Aun no sé, tenía pensado dárselas a la primera chica hermosa que vea, entonces son para ti."

Miranda, un poco ruborizada y encantada por el regalo de Jesús, solo pudo aceptarlo con una sonrisa.

Miranda: "Muchas gracias, son hermosas."

Jesús: "Sí, las vi y pensé en vos, son hermosas."

Miranda: "Ay, me sonrojas Jesús, eres todo un galán."

Jesús: "Solo me falta el traje y mi dama."

Ambos se rieron juntos y pasaron un buen rato, hasta que Jesús se tuvo que ir al trabajo.

Miranda: "¿Nos vemos mañana?"

Jesús: "Claro."

Miranda: "Te estaré esperando."

Jesús: "Pero tengo que saber tu nombre primero, ¿no?."

Miranda: "Me llamo Miranda."

Jesús: "Lindo nombre, nos vemos Miranda."

Después de que Jesús se fuera de la cafetería, Miranda solo pudo ver cómo se iba. Se sentía un poco rara, es como una sensación hermosa que provenía de su pecho, es cálida, dulce, es algo indescriptible, se siente como mariposas en su pecho. ¿Esa sensación que siente es amor?

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