Cuando se entra a la cueva de los lobos.....
-¡Papaaaa!- *grite desde mi habitación, mientras metía mis últimas pijamas en la maleta*
-Princesa ¿estas segura que esto es lo que quieres?- *Dijo la figura grande y fornida que se asomaba por la puerta* -sabes que no tienes que hacerlo, ahí es muy peligroso, y ¿si te hacen algo? O algo te pasa y no puedo ir a ayudarte, que será de mi sin ti princesa- *noté el dolor y la angustia de sus palabras, lo que hizo que mi corazón se encogiera*
-Voy a estar bien papá, por favor no te preocupes, prometo que te voy a llamar todos los días y te lo contaré todo, sabes que esto siempre fue mi sueño y me e esforzado mucho tiempo por cumplirlo- *dije tratando de mantenerme serena*
-Entiendo.....- *hizo una pequeña pausa antes de continuar* -Pero si algo pasa , lo que sea, que haga que te sientas insegura, solo dime e iré de inmediato por ti, prometemelo, ya perdí a tu mamá, no puedo perderte a ti también, no lo soportaría- *dijo al borde del sollozo*
-Lo prometo papi- *le dije mostrandole una sonrisa*
-Que diría tu mamá si supiera que su niña creció para ser una psiquiatra- *dijo a manera divertida* -un sueño extraño para alguien que quería ser un hada de pequeña, nunca lo entenderé, pero se que estaría orgullosa de ti, tanto como lo estoy yo- *me abrazo y sus palabras lograron conmoverme, es agradable escucharlo decir que esta orgulloso, aunque estoy segura que si supiera la razón de esto, él no me estaría apoyando, y eso me inquieta*
*El abrazo fue interrumpido por el sonido de un auto, que significaba qué ya me tenia que ir*
*Mi papá ayudo a bajar mis maletas, recordándome cada dos pasos que aun tenía tiempo de quedarme en casa, se despidió de mi y logre ver lágrimas bajar por sus mejillas, lo que destrozo mi corazón, nunca lo e dejado solo, él es todo lo que tengo, no pude evitar llorar cuando su figura dejo de ser visible a lo lejos y por un momento dude de lo que estaba haciendo*
-Señorita- *escuche una voz a lo lejos que me hizo volver de mi sueño,me quedé dormida y no me di cuenta, pero el hombre que miraba con gran detenimiento mi cara me desperto* -ya llegamos al muelle, el barco la esta esperando para llevarla al hospital-
-Muchas gracias- *dije un poco agitada mientras bajaba del auto*
-¿Lis Rodriguez?- *dijo el hombre armado frente a la entrada del barco* -podría enseñarme su identificación-
-Si claro, aquí está- *le di mi identificación, sintiéndome nerviosa por lo vulnerable que me sentía*
-Doctora Rodriguez- *dijo con un tono de burla* -¿no estas muy joven aun para ser ya una doctora? Solo tienes 21, ¿no es así?-
-S-si, así es, y-yo solo me esforcé mucho y logre saltarme algunos años de primaria y segundaría, era la más joven de la Universidad y también fui la que se graduó antes- *dije nerviosa*
-Una matadita entonces, un ratón de biblioteca- *dijo burlon mientras se reía* -siga usted "doctora"- *mencionó con sarcasmo*
*mi época de estudiante regreso a mi mente, era tan miserable en ese entonces, todos me tenían apodos y no tenía amigos, nadie quería ser amiga de la matadita, eso dolio*
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El Mountruo es inocente
Teen FictionEn un hospital psiquiátrico de la más alta seguridad se encuentras los pacientes más peligrosos del mundo, pero él es el peor. Todos lo odian y lo llaman mountruo, pero hay algo en todo esto que no cuadra, y yo lo voy a descubrir, se que él es inoce...