La pequeña Copeland ya tiene catorce, una tímida adolescente.
Todos saben que su padre es Kellin Quinn, el famoso vocalista de Sleeping With Sirens, lo que hace que en su escuela sea popular. Pero eso conlleva a que ella tenga muchos problemas en su formación social. Todos la quieren porque su padre es famoso y entonces cuando alguien realmente la quiere, simplemente no cree.
Ella cómo típica adolescente, tiene problemas. Sus padres se separaron cuando ella cumplió diez y ahora vive con su madre. Pero el problema no es que sus padres estén separados, sino que Kellin no es feliz y ella se culpa de todo.
El mejor amigo de su padre es Vic Fuentes, una hermosa persona. Hasta que llegó un momento en que ambos estaban perdidamente enamorado del otro, pero había un problema; Katelynne estaba embarazada de Copeland y Kellin no podía negarse en ese momento, incluso estaban comprometidos.
Copeland nació y eso hizo que la 'familia' se uniera. Katelynne y Kellin estaban felices juntos cuidando y protegiendo a Copeland, pero ella fue creciendo y ese amor hogareño se fue perdiendo, transformándose en discusiones subidas de tono.
Todo marchaba "normal", hasta que una noche ambos discutieron. Copeland se escondió en la cocina junto a su perrita, mientras ellos discutían en el comedor. Palabras ofensivas salían de la boca de ambos. Copeland tapaba sus oídos con ambas manos mientras lloraba. Cuando creyó que todo había cesado, destapó sus oídos y oyó las últimas palabras de Kellin.
"¡Si no hubiera sido porque estabas embarazada, te hubiera dejado y ahora podría ser feliz, pero tu lo impediste!" Gritó y se marchó.
Las palabras se repetían en la cabeza de Copeland, y lo que más se destacaba "si no hubiera sido porque estabas embarazada", ella había nacido de ese embarazo.
Y desde ese día Copeland es la culpable de haberse formado en el útero de Katelynne y de que su padre se infeliz.