𝗦𝗟𝗨𝗧!
❞everyone wants him that was my crime ❞
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𝗘𝗡 𝗗𝗢𝗡𝗗𝗘 Azul pensaba seguir con la idea de no buscar el amor por un tiempo más. Pero sus planes se ven afectados cuando el amor es quien la busca a ella y la pone frente a u...
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slut! chapter fourteen, maroon
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AZUL
Azul miraba con lastima y nostalgia las teclas del piano que iba tocando con sus dedos mientras pensaba en todo lo que habia pasado hace apenas unas horas atrás. Incluso aunque le pasó lo mismo anoche cuando intentaba dormir.
Se había pasado la noche entera dando vueltas en la cama. Y no había sido la emoción por haber hecho un show increíble en el estadio Velez. Estaba más que contenta por eso, pero no había sido esa la causa de su desvelo.
La causa tenía nombre y apellido. Gianfranco Odoguardi. Y esto había sido gracias a su encuentro en los backstage del estadio. Había sido su primera charla después de tanto tiempo. Además del primer reencuentro real.
Azul suspiraba mientras recordaba la conversación. Cada palabra que había salido de la boca de ambos. Su cuerpo temblar y acelerarse en el momento que vio a al conductor pasar por la gran puerta del camerino.
Incluso aunque estaba enojada, decepcionada y demás cosas, eso no evito que se haya fijado hasta en el más mínimo detalle en su ex, o como sea que se llame lo que ellos tuvieron.
Estaba casi igual, solo podía ver unas leves ojeras marcadas debajo de sus ojos las cuales antes no estaban. Pero por supuesto que luego de cuatro o cinco meses de seguro su rutina había cambiado y estaba quizás más cansado de lo normal.
Azul juraba que apenas lo vio, a pesar de todo, su mundo se detuvo por un segundo, como la primera vez que se habían conocido. Esa pequeña conexión entre ellos todavía estaba, incluso aunque ahora estuviera un poco más tapada por los sentimientos de enojo que tenía la rubia.
Apenas la rubia volvió a su casa, lo único que pudo hacer fue acostarse en la cama y pensar en toda esa noche. Miraba al techo pensando en el reencuentro que había tenido. En como igual le daba la cara al morocho para presentarse después de todo. Había tenido momentos para remediar sus actos, pero decidió hacerlo en esa noche tan especial. Porque incluso arriba del escenario, con su gran sonrisa fingida, seguía pensando en ese momento.
