capitulo 3

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Fue con una amplia sonrisa que Harry caminó por el camino hacia la puerta principal del Número 4 y la abrió, sin siquiera molestarse en ocultar su acercamiento. Fue con una sonrisa un poco menos amplia que estudió las numerosas varitas apuntadas a varias secciones de su anatomía por la masa de magos y brujas. De particular interés fue la linda bruja de cabello púrpura apuntando su varita a su entrepierna, y- "Profesor Lupin, Profesor Moody. Me alegro de conocerlos a los dos aquí".


Varias personas relajaron la guardia, pero Moody, al estilo típico de Moody, se mantuvo firme en su paranoia. "¿Cómo sabemos que eres el verdadero Potter?"


Harry arqueó una ceja. "¿Cómo sé que eres el verdadero Moody?"


Moody gruñó con leve aprobación y Remus dio un paso adelante, su voz ligeramente ronca. "Harry, ¿qué forma toma tu Patronus?"


Al ver hacia dónde iba esto, Harry suspiró. "Un ciervo, no es que realmente ayude; lancé ese hechizo frente a toda la escuela en mi tercer año, ¿recuerdas?"


Frunciendo el ceño, Remus lo intentó de nuevo. "¿Cuál es la contraseña para acceder al Mapa del Merodeador?"


"Colagusano es la perra de Voldemort, Moony. Esa pregunta tampoco ayuda."


Estremeciéndose ante el nombre de Voldemort e ignorando una serie de aullidos y estremecimientos de sus compañeros, le tomó al hombre lobo un minuto pensar en una pregunta más infalible. "... ¿Por qué te devolví el Mapa del Merodeador?"


Harry asintió con aprobación. "Una pregunta mucho mejor. Me la devolviste porque ya no eras mi maestra y no te sentías incómodo al hacerlo. Ahora que eso está resuelto, tengo un par de preguntas propias".


Mientras la mayoría de los que agitaban la varita se relajaron y todo el grupo se dirigió a la cocina, Remus fue quien habló. "¿Cómo puedo probarte mi identidad?"


Harry agitó su mano con desdén. "No, sé que eres tú. Lo que quiero saber es; ¿quiénes son el resto de estos pervertidos y por qué de repente han decidido dejar de gatear entre los arbustos y espiarme a todas horas?"


La mayoría del grupo se rió, aunque Remus tosió varias veces y una bruja de aspecto majestuoso parecía claramente ofendida. Un mago negro, alto y calvo se rió profundamente. "Definitivamente el hijo de James."


Un mago de cabello plateado y voz sibilante añadió sus dos knuts. "Sin embargo, los ojos de Lily."


Riendo levemente, Harry sacudió la cabeza. "No exactamente, ya no."


Moody gruñó, aparentemente el único que REALMENTE había estado prestando atención. "Ojos de gato. También parecen alas de fénix. ¿Qué has estado haciendo, muchacho?"


La adolescente unida se encogió de hombros. "Fui a un Centro de Empalme. Es una cosa muggle bastante reciente, pero mis genes fueron reorganizados y modificados. Ahora soy mitad pantera; lo que me da un físico mejorado y una visión perfecta, como la de un gato, y mitad fénix". , regalándome estas bellezas." Estiró sus alas lo más que pudo en la estrecha habitación, silenciando al resto del grupo mientras contemplaban su magnífico nuevo plumaje.


La joven de cabello púrpura dio un paso adelante, vacilando ligeramente, antes de pasar sus dedos por las plumas de Harry después de un asentimiento del adolescente en cuestión. "...guau..."


"Genial, ¿eh?"


Remus levantó la mandíbula del suelo. "Harry... ¿cómo es esto posible?"


El Niño-Que-Vivió se encogió de hombros. "Algunos muggles han estado trabajando en esto durante décadas, y finalmente lo perfeccionaron y establecieron centros donde el público en general puede alterarse. Oye, tal vez deberías entrar y echar un vistazo, Moody".


El ex Auror dejó de jugar con su ojo mágico para fijar su ojo normal en el adolescente empalmado. "¿Y por qué debería hacer eso, Potter?"


"Una de las principales razones por las que idearon este proceso fue para ayudar a tipos como tú. ¿Sabes cómo a algunos lagartos más pequeños les pueden volver a crecer las extremidades perdidas?"


"...Prefiero quedarme con una pierna que convertirme en un hombre lagarto."


La mujer que acariciaba las plumas de Harry soltó una risita. "Consigue que te conviertan en un hombre camaleón; podrás mimetizarte con tu entorno y podrás mirar a todos lados con AMBOS ojos".


Apartando la imagen de Moody, de piel verde y ojos enormes, gritando '¡Vigilancia constante!' y mordiendo insectos con su lengua, Harry corrigió los conceptos erróneos del viejo Auror. "Simplemente haz que te vuelvan a convertir en un ser humano completo una vez que te crezca la nueva pierna. Esto no es necesariamente permanente, ¿sabes?"


Dejando a un lado la idea para considerarla más adelante, Moody se sacó su ojo mágico con un sorbo repugnante y se acercó al fregadero, agarró un vaso de una rejilla y lo llenó con agua del grifo. "Supongo que la razón por la que no estabas aquí es porque estabas afuera consiguiendo... 'Empalmadas', ¿verdad?"


"Sí, más o menos."


Remus negó con la cabeza. "Harry, eso fue muy peligroso; ha habido avistamientos de Dementores en todo Londres durante todo el día".


Los ojos del gato parpadearon sorprendidos. "Eh... ¿el Señor Oscuro?"


El Merodeador se encogió de hombros con impotencia. "No lo sabemos, pero hemos decidido trasladarlo a un lugar más seguro".


El medio fénix sonrió. "¡Genial! Si tuviera que permanecer encarcelado en esta pequeña casa de mierda, obligado a ser un elfo doméstico por sólo un día más, habría tenido que lastimar a alguien."


Varios individuos mágicos de repente parecieron muy culpables.


Harry lo notó. "Fuera. Ahora."


Remus hizo una mueca. Esa era una réplica casi exacta del tono de voz patentado de Lily 'Estoy-cabreada'. "Harry..."


El adolescente señaló el pasillo, su rostro no mostraba nada más que evidente molestia. "La puerta de entrada está por ahí. Úsala".


Moody se sacó el ojo de un vaso de agua y se lo volvió a meter en la cabeza, pero se mantuvo de espaldas a los demás mientras hablaba. "Chico, ya somos miembros de un grupo de vigilancia ilegal. Un pequeño secuestro no nos meterá en muchos más problemas si nos atrapan".


La mujer de cabello púrpura hizo una mueca y dio un paso atrás, habiendo dejado de cepillar las plumas de Harry hace un rato; se habían puesto demasiado calientes para tocarlos. "No tenías que decirlo de esa manera, Moody."


"El muchacho merece saber la verdad. No estoy convencido de que Dumbledore tenga razón al mantenerlo aquí o al traerlo a la casa, pero tendrá que ser suficiente hasta que se solucione este lío con los Dementores. Ahora, Harry , ¿vamos a hacer esto de la manera fácil o de la manera difícil?"


Cruzando los brazos y recostándose contra el mostrador, Harry se preparó para lo inevitable. "Estoy seguro de que no te lo voy a poner más fácil".


Moody se encogió de hombros. "Me parece bien." Se dio la vuelta y agitó su varita con una velocidad sorprendente, disparando un aturdidor.


Harry se hizo a un lado, doblando sus alas contra su espalda y maldijo cuando se encontró en el camino de un segundo Stunner. Cayendo debajo de dicho segundo Stunner, maldijo de nuevo cuando se encontró a un pelo de un TERCER Stunner, sin espacio ni tiempo para esquivar.





"...¿Estás bien ahí, Harry?"


Mirando el mar de rostros preocupados familiares y desconocidos, Harry puso los ojos en blanco. "No en lo más mínimo. ¿Dónde diablos estoy?"


Sirius Black, fugitivo de Azkaban y animago canino, agarró a Harry del brazo y lo puso de pie, antes de entregarle un pequeño trozo de papel. "Toma, lee esto."


"La sede de la Orden del Fénix se encuentra en el número doce de Grimmauld Place, Londres. ¿Y?"


Sirius sonrió. "Entonces, estás en la sede de la Orden del Fénix, que se puede encontrar en el número doce de Grimmauld Place, Londres".


Una voz sarcástica interrumpió el discurso de los demás. "Veo que tu destreza mental es tan aburrida como siempre, Potter."


Harry hizo a un lado a varias personas hasta que pudo ver bien al Maestro de Pociones, sentado arrogantemente en lo que parecía ser una mesa de comedor en la sombría cocina-comedor que todos ocupaban. "Oye Snape, deberías intentar quitarte esa vara del culo; la mierda está empezando a gotear cada vez que mueves tus estúpidas encías".


La mayoría trató de ocultar sus risitas, aunque Sirius soltó una fuerte carcajada mientras Severus Snape se sonrojaba enojado. "Deberías mostrar más respeto a tus superiores,Alfarero; De lo contrario, podrías encontrarte en una situación desesperada".


"En serio, hay basura, justo ahí en tus labios". Harry amablemente señaló el área afectada en su propia cara.


Evidentemente, esa útil idea no fue apreciada, y Snape se puso de pie, sacando su varita en un movimiento agudo y practicado, y la apuntó a la ruina de su existencia.


Una vez más, una voz interrumpió cualquier conversación o acción adicional, solo que esta vez era anciana y reprensiva. "Harry, no hay necesidad de enemistarse con el Profesor Snape. Aquí todos estamos del mismo lado."


Harry frunció el ceño. "Qué curioso, no recuerdo haberme tatuado nunca la Marca Tenebrosa en el brazo".


El profesor Snape se burló, como a la mayoría de los Slytherins se les enseñó a hacer para mostrar su disgusto. "Director, creo que sería mejor si el mocoso mimado saliera de la sala para que podamos comenzar la reunión".


Harry parpadeó y se retorció, cuando una chispa de conocimiento hizo clic inesperadamente en su cabeza. "¿Sabes qué, Snape? No podría estar más de acuerdo contigo."


*¡FUUUSH! ¡FUUUSH! GRAB FWOOSH * Antes de que la vista de todos pudiera recuperarse de haber sido deslumbrados por varias ráfagas de llamas, una última ráfaga de fuego depositó a Harry James Potter sobre la mesa del comedor, menos un profesor y más una enorme sonrisa. Aparentemente imperturbable por la nueva habilidad de Harry, pero aún suspirando con cansancio, Dumbledore miró al estudiante con cicatrices de rayos con la mirada disciplinaria de un educador. "¿A dónde llevaste al profesor Snape, Harry?" Harry se tocó la barbilla pensativamente. "Hmm, tal vez... sesenta... setenta pies sobre el lago de la escuela". Aunque Sirius se echó a reír una vez más, al Director no le hizo gracia en lo más mínimo. "Una caída así podría herir gravemente a un hombre, Harry. Debo confesar que estoy muy decepcionado por tu comportamiento". Harry estudió sus uñas, completamente indiferente a la desaprobación de Dumbledore. "No estoy tan decepcionado como yo por tu comportamiento, viejo." El ex profesor de transfiguraciones miró al adolescente durante un largo momento antes de simplemente salir de la habitación, eligiendo no continuar con el asunto y preferir cazar y cuidar a su espía. En el silencio, Molly Weasley se hinchó, ganando toda su fuerza, antes de que Harry la descarrilara saltando de la mesa y deslizándose junto a ella. "Hola Sirius, ¿te apetece un poco de vínculo entre padrino y ahijado?" El perro a tiempo parcial asintió con entusiasmo. "¡Puedes apostarlo! ¿Qué tenías en mente?" En uno de los muchos estudios en su vasta mansión, Lucius Malfoy se estaba tomando el tiempo para relajarse después de un largo día de dar vueltas, negociar y manipular. El Señor Oscuro era una criatura difícil de aplacar en el mejor de los casos, y se habían necesitado muchas promesas para sobrevivir a su ira. Una vez más, Lucius se vio colocado en la incómoda posición de hacer que sus propias necesidades inmediatas fueran secundarias a los deseos de su 'Maestro'. "...¿Por qué no podía simplemente quedarse muerto?" *FWOOSH *






































La mirada del hombre rubio pasó del periódico en sus manos a la alegremente crepitante chimenea, pero las llamas verdes de la red Flu estaban curiosamente ausentes. Después de varios momentos largos y tensos, el Mortífago del Círculo Interno se relajó lentamente, enderezó su periódico y se preparó para leer.


*¡CRUJIDO! *


Mientras la alta rubia se desplomaba en el suelo, increíblemente inconsciente, dos figuras sonrientes y empuñando bates se quitaron sus capas de invisibilidad. "Parece que tenías razón; eso FUE bastante fácil".


Harry arrancó la varita del Patriarca Malfoy del suelo y la rompió con un fácil movimiento. "Un poco te hace preguntarte por qué el viejo no ha hecho esto todavía".


Sirius se encogió de hombros. "¿Tal vez piensa que no es ético, o que es demasiado mayor para ensuciarse las manos?"


"Esas son excusas bastante débiles". Agarrando al mago inconsciente, Harry desapareció en una ráfaga de fuego, pero reapareció con las manos vacías casi de inmediato. "Entonces, ¿quién es el siguiente en la lista?"


Sacando un trozo de pergamino de su bolsillo, Sirius tachó 'Lucius Malfoy' con su varita y comprobó el nombre debajo. "Sidioso Nott."


"Estaba en la página 386 del directorio de carreteras, ¿verdad?"


"Déjame ver." Una mirada rápida al grueso libro ofrecido y Sirius asintió. "Sí, ahí es donde se encuentra Nott Manor".


Harry guardó el directorio de carreteras en su mochila de Hogwarts y recogió su fiel capa de invisibilidad antes de extender la mano. "¿Debemos?"


La mano de Sirius agarró la de Harry con un agarre sorprendentemente fuerte dada la duración de su encarcelamiento y su período relativamente breve de recuperación. "Deberíamos."


*FWOOSH *

Harry con genes empalmadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora