Sé que he abandonado mis KORI's del alma, pero vengo a redimirme con este pequeño cuento. Pronto regresaré con más, espérenlo. saludos. ¡Ah! por cierto, esta como todas mis historias, están protegida por derechos de autor, así que eviten problemas legaleeeees. Les amo.
ESTE ES DE UN SOLO CAPÍTULO, PARA QUE NO ANDEN PREGUNTANDO SI VA A HABER MÁS. NO, NO HAY MÁS, SOLO ES ESTE.
Eran cerca de las ocho de la mañana cuando Yoongi llegó a la empresa, un gran consorcio familiar del que se hacía cargo desde hace un par de meses, cuando su padre se retiró; enfundado en un traje que gritaba a los cuatro vientos su alta costura, unos zapatos negros que llamaban la atención por lo pulcros, el rolex brillando con la luz natural, su cabello azabache bien peinado hacia atrás para resaltar la frente descubierta y él, con el rostro que cualquier muerto viviente tendría cada lunes en la mañana. Miró la entrada del edificio no muy seguro de querer entrar, quería regresar al auto, ordenarle al chofer que lo devolviera a casa y de paso que lo cargara hasta su cama, como un nene, porque eso era en lo que se convertía Yoongi cada vez que entraba a ese edificio, un bebé que no podía resolver el más mínimo conflicto.
―Anda, no seas cobarde.
Una dulce voz lo sacó de su ensoñación. Era parte de su rutina encontrarse con Jimin, su asistente, en la entrada del edificio para caminar juntos hasta el elevador y después, a la oficina. En todo ese recorrido Jimin se encargaba de animarlo, de eliminar esa errónea idea de lo inservible que era para la empresa. Eran quince minutos de escuchar los halagos de Jimin pero era mejor que leer un libro de autoayuda, porque tiempo era lo que menos tenía.
En un principio le sorprendió que su padre le impusiera a ese hombre como asistente, una semana le bastó para darse cuenta de la razón. El dichoso asistente tenía años trabajando en la empresa, de hecho, en los últimos tres años asistió a su padre, el señor Min. Jimin era el verdadero CEO, él solo servía para dar una buena imagen a la compañía y ya. Se indignó, quiso renunciar pero ni Jimin ni su padre se lo habían permitido. "Es suficiente de la vida fácil, Yoongi, ya es momento de que madurez y te establezcas" le había dicho su padre. "Eres libre de renunciar, claro que también renunciarías a tus bienes de heredero, pero bueno, un adulto como tú me imagino que sabría manejar muy bien la pobreza" y no, Yoongi no estaba listo para ser pobre, así que no tuvo de otra que cooperar con Jimin.
El asistente no tenía nada de malo, al contrario, su voz era dulce, de carácter fuerte, con un porte imponente, su vestimenta era similar a la suya, todo un león dentro de la empresa, pero con él, con él siempre era amable, cariñoso, comprensivo, tenía más finta de niñera que de asistente. Ni siquiera se dio cuenta de cuando fue que empezó a gustar de él. El "cómo" lo tenía más que claro, Jimin logaba que cualquier hombre dudara de su sexualidad y volvía locas a las mujeres. Tal vez fueron todas esas noches que se quedaron trabajando hasta altas horas de la madrugada, cuando veía a Jimin quitarse su corbata y abrir algunos botones de su camisa, con las mangas arremangadas hasta cerca del codo; a lo mejor se trataba de las atenciones que tenía con él, llevándole un café todas las mañanas para terminar de desperezarse, o los almuerzos que pasaron juntos porque Yoongi de lo estresado que estaba se olvidaba de comer; puede ser que le encante esa manera en la que le levanta los ánimos, diciendo chistes, siendo tan espontáneo, viéndose tierno con cada gesto que le dedicaba; lo más seguro es que sea por lo caliente que se ven con esos pantalones rojos, ceñidos a sus piernas, a ese redondo y respingón trasero, el como el tatuaje de luna resalta en su espalda a través de las camisas que utiliza, el cómo su cabello rubio, de corte desvanecido se acoplaba perfectamente al peinado de librito que últimamente ha estado de moda o que muy o a su rostro, tan perfecto para un gesto tierno o uno totalmente obsceno.
―Yoongi, camina.
Jimin le sacó de su ensoñación. Como si sus pies estuvieran pegados al pavimento avanzó de manera mecánica, hasta el lado derecho de su asistente que ya le estaba abriendo la puerta principal.

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☆Antología YoonMin☆ ||BTS||
Truyện Ngắn《PROLOGO》 Antología de breves relatos YoonMin (cuentos, oneshot, etc.) Habrá de TODO, así que no acepto quejas. NO SON MINI FICS. Solo son textos relacionados con temas literarios. Estas son mis prácticas escolares. OJO, TODO, ABSOLUTAMENTE TODO ES...