# 𝟬𝟰.

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Iván desarrollo la costumbre de tomar la mano de rodrigo todo el tiempo desde entonces.

Sus ojos siempre parecían asustados, y muchas veces rodrigo tomaba sus mejillas para mirarlo fijamente, los ojos del mayor eran lo contrario, fríos y tranquilos, eran lo único que podía relajario.

Y era extraño pero hermoso, cómo el mayor notaba el pánico crecer en el menor, y cómo simplemente tomaba su rostro, aplastando ligeramente sus abultadas mejillas y se acercaba hasta que la vista era sólo él, enfocaba los ojos en el otro, conectaban miradas y se quedaban allí largos minutos, sin decir o hacer nada más, hasta que finalmente iván lo abrazaba como agradecimiento, cuando aquello funcionaba y se sentía más tranquilo, un poco más a salvo.

Se encargaban de caminar juntos, de la mano, haciendo avanzar los cristales en sus tiempos de aburrimiento, sin más, viendo a la nada eterna e infinita.

─ ¿Crees que en verdad podramos salir de esto? ─ era una pregunta que iván formulaba cada tanto, que rodrigo últimamente contestaba de la misma manera.

─ Aunque cueste una noche o cien años ─ decía, asintiendo. ─ Algún día saldremos de aquí.

⪩  !  𝙡𝙤𝗏𝖾𝗅𝗒  ,  𝗿𝗼𝗱𝗿𝗶𝘃𝗮𝗻.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora