# 𝟬𝟵.

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Al otro día, al despertar, las plantas ya no eran verdes, ya no estaba esa selva abundante que habían visto aparecer, ahora todo estaba seco y negro, como si un incendio hubiera pasado.

Ambos se miraron con algo de incógnita, fue iván quien se separó de las manos que siempre tenían unidas y fue hasta el cristal, viendo las plantas que tanto disfrutaba con vida ahora muertas.

Su mano se alzó frente al cristal, golpeando el vidrio con un dedo, nada pasó.

─ ¿Qué ocurrió? ─murmuró iván.

Rodrigo miró alrededor, se sintió terrible que las plantas estuvieran muertas, y aún peor de no saber el por qué.

─ ¿Es una señal? ─preguntó iván, su ceño se frunció─ ¿Y... Si nosotros seguimos?

─ No ─Rodrigo habló en tono contundente.─ No, iván, no voy a permitirlo. ─se acercó a él, colocando una mano en su cintura, acercándose a su rostro, dejando que el menor se concentrara en sus ojos como siempre, hasta estar más tranquilo.

Iván miró un momento los labios del mayor, y lo pensó un segundo, antes de alzar la vista de nuevo y posar sus labios sobre la nariz de rodrigo, en un diminuto beso.

─ ¿Te estás acercando de apoco? ─ preguntó rodrigo, con algo de burla.

Iván negó, con una sonrisa.

─ Como técnicamente no lo recuerdo... Sería mi primer beso y quiero esperar un poco más... ─Rodrigo asintió, con una mueca en los labios.

─ Sería una pena si lo robo ─murmuró, recibió un golpe en el pecho de parte del menor, haciéndolo reir.

─ Tonto...

Y ninguno le prestó atención a las plantas mientras estas se deshacían en polvo, dejándolos con la misma nada que habían tenido desde el principio.

⪩  !  𝙡𝙤𝗏𝖾𝗅𝗒  ,  𝗿𝗼𝗱𝗿𝗶𝘃𝗮𝗻.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora