HIMPERIO THAI

Capitulo 37

A medida que el hombre me observaba, escuchaba con atención el tono grave y apremiante de su voz mientras Pone  el celular en mi oido.   "Habla Freen".

Esta vez no era la  voz de Becky. Era mi propia voz, grave y cansada, que dijo  "Hola?"

.

" Hola freen, días sin hablar contigo"

F - con quién hablo?

" Hablas con el que cenaste la última vez "

F - nose como te llamas..

" Es lo de menos, llegaré al grano. Me enteré de que por poco y le dices todo a Nam, es eso cierto?  "

F - ..... -

" Habla freen. "

F - necesitaba desahogarme con alguien, además ella no Hiba decir nada.

" Pero te dije como era esto, y estás jugando con fuego freen. y te vas a quemar. "

F - no quiero que le pase algo a mis amigos por un error  mio, dame otra oportunidad, solo te pido eso. No te volveré a defraudar. 

" Mmm no lose, tal vez, sabes? Está mafia no perdona errores, pero por ti are un pequeño cambio. "

F - gracias! Te lo agradezco mucho enserio.

" De todos modos ambos trabajamos para el mismo lado no? "

F - s...si

" Te daré una advertencia más, si vuelves a defraudar mi confianza....creeme que no la cuentas. "

F - si...

" Ahora vete a tu casa, mantente  en  cuarentena por unos días y te daremos un teléfono nuevo, ya que uno de  mis  hombre te lo daño no es así? Además estára monitoreado, en un rato te lo entregan espera más indicaciones y luego procede hacerlo okey? "

F - si...

" Nos vemos... Freen "

En ese momento el hombre que  Tania alfrente me  quitó el teléfono de mi oreja y lo dirijo a su  dirección, unos segundos después de aver recibido algunas ordenes por teléfono colgó y de dirijo ami.

" Está es la siguiente indicación, te vas a ir por esa calle.  En esa dirección abra un hombre el cual te dará un teléfono, el ya sabe quien eres,  resive el teléfono y vete a casa y as todas las indicaciones que te dijo el jefe antes,  ahora lárgate "

" Asiento y me voy a la dirección que me dijo "

salgo del edificio, pensando en todo lo sucedido y el tipo de gente con quien me he metido. Mi destino está marcado y acepto mi suerte. Avanzo con pasos lentos, intentando no atraer la atención.

Al salir del edificio, encuentro al hombre que me ha estado observando. Su mirada es fría y decidida, aunque parece un tanto incómoda.

Siento una extraña sensación en mi estómago.
El hombre se acerca a mí y me entrega el teléfono.

"Aquí tienes el teléfono y las indicaciones de el  jefe. Esta vez te perdonó, pero si te vuelve a ver intentando traicionarnos, te aseguro que no volverás a ver la luz del día."

Sé que no es una amenaza hueca.

Escucho las palabras del hombre, mi corazón tarde con fuerza en mi pecho. Aún estoy asustado por lo que podría suceder, pero trato de mostrar fuerza.

F - Lo entiendo, no habrá una próxima vez, puedes estar seguro de eso.

El hombre me mira con desconfianza, pero luego asiente.