Capítulo #1

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Will observaba el río, en el que en este momento se encontraba su futura cena. Él y su fiel caña siempre conseguían un buen botín.
Luego de dejar su empleo en el FBI, el castaño se había vuelto una especie de ermitaño. Yendo a la ciudad solo cuando era necesario. Internándose en lo más recóndito del bosque junto a sus perros.
Era una vida solitaria, pero disfrutable para él. No necesitaba demasiado, con tener a sus perros él ya era más que feliz.
Incluso llegando a construirse una pequeña huerta. En la que se había esmerado mucho.
Ese día no era distinto, Will esperaba pacientemente a que algún pez cayera en la trampa y mordiera el anzuelo. Mientras que Winston, uno de sus perros, jugueteaba a su alrededor.
Finalmente noto que había pescado algo, sacándolo del agua y guardándolo en la pequeña nevera que llevaba consigo.
Will se dispuso a volver a su hogar cuando escucho un fuerte aullido de dolor. El castaño decidio averiguar que era. Sorpresivamente acercándose más a su casa, cuando llego al lugar se encontro con un gran venado en el suelo. Con una de sus patas atrapadas en una trampa. Will la observo con detenimiento, no iba a poder caminar por un tiempo. El venado se despertó. Asustando a Will, quien retrocedio mirando como el animal intentaba huir.

Will: No te voy a hacer daño... (Aseguró)

El venado lo observaba con sus ojos marrones, llenos de desconfianza.

Will: Tranquilo... Solo quiero ayudarte... (Continuo, mientras se acercaba lentamente)

El venado no quitaba su mirada de Will, como si él fuera a saltarle encima.
Will consiguió acercarse lo suficientemente cerca al ciervo para acariciarlo, intentando que confiara en él.
Will tomo la trampa y como pudo la abrió. Permitiendo que el venado sacara la pata.

Will: Ven... Tengo comida y puedo ayudarte con tu pata

El animal siguió a Will caminando lentamente mientras cojeaba. El frío comenzo a internarse en aquel lugar rápidamente, el invierno estaba cerca. Will lo había previsto y había estado más tiempo del normal pescando, consiguiendo suficiente para subsistir en el invierno. Aunque si debía iría hasta la ciudad, por más de que no fuera su mayor deseo.
Will guio al animal hasta su hogar, advirtiéndole de la cantidad de perros que tenía, no sabía porque, pero el venado parecía entenderle. Así que se aseguro de que estuviera tranquilo.

Will: Tranquilos chicos, él esta de visita, necesita ayuda (Menciono tranquilizando a sus perros)

El animal siguió a Will hacía un pequeño patio que el castaño tenía en la parte trasera de su hogar, para poder soltar a sus perros y no tener que preocuparse de tener que vigilarlos demasiado.

Will: Espérame aquí (Pidio adentrándose en su hogar nuevamente)

Luego de unos minutos el castaño volvio con una caja extraña, a ojos del venado. Quien lo había esperado pacientemente.
Will en un par de minutos limpio y vendo la herida del ciervo. Protegiéndola de empeorar.

Will: Puedes quedarte mientras se cura (Menciono acariciando la cabeza del venado, de donde salía su gran cornamenta) ven, tengo una chimenea que a mi y a los chicos nos encanta en esta época del año

Will guio al venado hacía una cama que había preparado para él, cerca de la chimenea.

Will: Supuse que no querrías dormir con ellos (Dijo mirando a sus perros, quienes dormían sobre el sillón)

El venado se acerco al hombre lamiendo su rostro a modo de agradecimiento. Recibiendo una caricia por parte del castaño.

Will: Descansa tranquilo... Imagino que has tenido un día largo

Will se despidio de sus perros y se dirigio a su habitación. Preparándose para dormir, mientras se estaba cambiando noto una mirada de alguien. Se dio vuelta y se encontro al venado en la puerta de su habitación.

Will: ¿Qué haces? Deberías estar descansando (El venado se acerco al hombre buscando sus caricias) 

Will intenta llevar al ciervo donde estaba la cama que le había preparado. El venado no quiso ir, dirigiéndose hacía la cama de Will.

Will: ¿Quieres dormir ahí? (Suspiró) Bien, pero has lugar para mi

Will se acosto en su cama, mientras que el ciervo se acurrucaba a su lado, con su cornamenta sobresaliendo.

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