Capitulo 14

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Naruto yacía bajo la sombra de un gran árbol en un claro apartado, inconsciente y en silencio. El sol del mediodía filtraba sus rayos a través de las hojas, creando un patrón de luz y sombra sobre su cuerpo. Vapor blanco emergía de sus heridas, una señal del poder regenerativo del zorro de nueve colas dentro de él, que sanaba quemaduras y cortes con una eficiencia sobrenatural. Las heridas, que habrían sido letales para cualquier otra persona, se cerraban lentamente, dejando atrás solo cicatrices rosadas que pronto desaparecerían.

En su mente, Naruto no estaba en el claro ni bajo el árbol. Se encontraba en un lugar completamente diferente, un vasto palacio de oro que brillaba con una luz propia, como si cada superficie estuviera bañada en un resplandor divino. Los techos altos y las columnas ornamentadas daban al lugar una sensación de grandeza y misterio. Sin embargo, a pesar de la magnificencia del palacio, Naruto no podía sacudirse una sensación de irrealidad. Todo parecía demasiado perfecto, demasiado brillante.

En el centro de este vasto salón, había una mujer voluptuosa vestida con un largo vestido blanco. Su rostro estaba distorsionado, como si estuviera visto a través de una lente empañada, impidiendo que Naruto pudiera ver sus rasgos claramente. Sin embargo, su figura emanaba una presencia poderosa y enigmática. En sus manos sostenía un trozo de arcilla, que manipulaba con delicadeza y concentración.

Confundido y tratando de entender lo que estaba sucediendo, Naruto se acercó cautelosamente. —¿Qué está pasando? —preguntó, su voz resonando en el vasto espacio—. ¿Dónde estoy? ¿Y quién eres tú?

La mujer no pareció escucharlo. Continuó trabajando con la arcilla, sus manos moviéndose con precisión y gracia. Naruto frunció el ceño, tratando de recordar cómo había llegado allí. Recordaba haber estado hablando con kurama, recordaba la tensión en el aire y las palabras desafiantes que habían intercambiado. Luego, todo se volvió borroso. La imagen de Kurama se desvaneció y lo siguiente que supo fue que estaba en este palacio dorado.

Frustrado por la falta de respuestas y la imposibilidad de recordar los eventos recientes, Naruto decidió centrarse en la mujer. A pesar de que no podía ver su rostro, había algo en su presencia que lo intrigaba. La forma en que trabajaba con la arcilla era hipnótica, como si cada movimiento estuviera cargado de significado.

—¿Qué estás haciendo? —volvió a preguntar, esta vez con más urgencia—. ¿Y por qué no puedes verme?

La mujer siguió sin responder, pero Naruto notó que la arcilla en sus manos empezaba a tomar forma. Poco a poco, la figura de un zorro se materializaba, sus detalles finamente esculpidos con una precisión asombrosa. Naruto sintió una extraña conexión con la figura, como si estuviera viendo una parte de sí mismo representada en la arcilla.

Observó en silencio mientras la mujer continuaba esculpiendo. A medida que el zorro tomaba forma, Naruto comenzó a sentir una resonancia dentro de sí, una sensación de que este lugar, este palacio dorado, no era solo una creación de su mente, sino un reflejo de algo más profundo y fundamental. La mujer, con su rostro distorsionado, parecía ser una figura clave en este misterio.

Finalmente, Naruto dio un paso adelante, decidido a obtener respuestas. —¡Oye! —exclamó—. ¡Necesito saber qué está pasando! ¿Por qué estoy aquí y quién eres tú realmente?

Por un momento, pareció que la mujer iba a responder. Se detuvo, levantando la cabeza ligeramente, pero en lugar de hablar, volvió a centrarse en su obra. El zorro en sus manos ahora estaba completo, y de algún modo, parecía aún más real que antes, casi como si estuviera vivo.

Naruto sintió una oleada de frustración y desesperación. Estaba atrapado en este extraño lugar sin respuestas, con una figura enigmática que parecía ignorarlo deliberadamente. Sin embargo, al observar el zorro esculpido, algo dentro de él hizo clic. Este lugar, esta mujer, y la figura del zorro eran partes de un rompecabezas que debía resolver para avanzar.

El Amor de una Reyna ( Remake)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora