PREDESTINADA

Capítulo II: De brujas y otras criaturas.

-¿Qué es este lugar? -Decía mientras me soltaba del pecho de ese chico y giraba mi cabeza por todo el lugar-.

-Es tu verdadero hogar, Nahila.

-¿Cómo me llamaste?

-Nahila, ese es tu nombre.

-No, mi nombre es Nahiara. N A H I A R A, Nahiara. -Recalqué casi indignada por la equivocación de aquel chico.

-Nahiara es el nombre que te dieron esos padres humanos que escogimos para ti, querida niña. Tu verdadero nombre es Nahila.

¿Esa voz otra vez?, me giro y veo nuevamente a esa mujer con la que me crucé en el hospital.

-¿Quién es usted? -Dije mientras me acercaba lentamente a aquella mujer desconocida-.

Derek se puso frente a ella y me dijo:

-Todavía no es tiempo de que hables con ella. Primero ven conmigo, puedo explicarte mejor.

Tomó fuertemente mi mano y de un segundo a otro, casi de forma mágica, nos trasladamos a una pequeña casa alumbrada solo por el fuego de una chimenea rústica ubicada en medio de la sala.

-Antes que hagas cualquier tipo de pregunta quiero aclararte que no soy un chico malo.

-Lo sé. -Respondí tranquila-.

-¿Lo sabes? -Preguntó atónito-.

-Bueno, no lo sé. Simplemente siento que no eres un chico malo. No soy una persona que confíe en desconocidos, más bien, la única persona en la que confío plenamente es en mi hermano menor, Daniel. -Dije de forma serena y continué-. Cuando apareciste sentí un tono de familiaridad en tu voz y me provocó paz de forma casi instantánea. Y nació esa curiosidad de querer escuchar todo lo que tengas que decir.

-¿Debería sentirme afortunado por eso? -Dijo con un tono sarcástico en su voz, de la misma forma en que yo me expreso con otras personas-.

-¿Quién eres?

-Sé que esto va a sonar demasiado extraño para ti, pero soy tu hermano mayor. Mi nombre es Derek Fireheart, brujo avanzado de la colonia Storm. En el mundo humano soy conocido como Derek Farah, un reconocido psiquiatra.

Algo comenzaba a tomar sentido en mi cabeza al escuchar ese nombre.

-Sé que por ese nombre logras reconocerme, porque al igual que a ti, a mí también me gusta obtener todo el reconocimiento posible. La diferencia está en que mi aspecto físico en el mundo humano es distinto, para que nadie reconozca quien soy verdaderamente. Mis padres eran... -suspira y comienza la frase de nuevo-. Nuestros padres eran León y Sara Fireheart, brujos avanzados que fueron asesinados el día que naciste.

-Espera... ¿quieres decir que soy adoptada? Guau, esto es... -Dije entre sorprendida y feliz-.

-Legalmente adoptada... diría que no.

-¿Entonces de qué se trata todo esto?

-Te voy a explicar todo paso a paso, solo déjame continuar, pero... ¿no te asusta o intriga el hecho de que mencioné que soy un brujo?

-No soy alguien fácil de sorprender, deberías saberlo si me has seguido todos estos años. El mundo y las criaturas que habitan en él, son complejas, eso lo sé bien. Primero continúa y luego hablaré de lo que pienso. -Dije ansiosa por escuchar, pero seria a la vez-.

-Tienes razón, el mundo es bastante complejo. El de las criaturas mágicas también forma parte de ese mundo, aunque quizás no sabías de su existencia. Hemos vivido en paz durante miles de años, y los brujos siempre hemos sido los más pacíficos, pero también los más poderosos. Seguidos por los vampiros y por los lobos. Nuestro poder ha ido creciendo a medida que la ciencia avanza en nuestra colonia, a tal punto de que la envidia ha ido consumiendo a las demás criaturas y han buscado unirse para acabar con nosotros.