PREDESTINADA

Capítulo III: La familia es primero.

Amo demasiado a David. Ese niño ha sido la luz de mis ojos desde que lo vi en mis sueños, el mismo día que Sofía nos contó que estaba embarazada.

"Lo conociste antes que yo". Fueron las palabras de Daniel cuando describí a la perfección el aspecto del pequeño David.

Lo que Derek estaba contándome no solo estaba haciendo explotar mi cabeza, sino que le estaba dando sentido a todo lo que alguna vez pasó por mis pensamientos. Si era una fantasía, no quería despertar, pero tampoco quería que afectara a mi familia humana.

-¿Cómo puede ser posible que mi sobrino absorba mis poderes?

-Los niños son más sensibles a las energías proporcionadas por otros seres, y en tu caso, el poder que cargas siente que tú no eres suficiente para controlarlo y buscó a otro ser que fuera sensible a él para intentar amoldarse. Por esta razón Artemis y yo debimos intervenir, porque sabemos que David no será suficiente y que tu próximo sobrino viene en camino.

-¿Existe forma de extraer esos poderes de David ahora?

-Sí, hay una forma, pero para eso tú debes poder controlar tus poderes al 100%, porque solo la dueña del poder puede otorgarlo o quitarlo.

-¿Y cómo haré eso?

-Con el entrenamiento necesario. -Dijo una voz firme y femenina a la distancia-. Tú eres Nahila Fireheart, no hay nada que un Fireheart no pueda hacer.

-¿Artemis? -Sonreí-.

-Así es. -Dijo mientras se acercaba para darme un abrazo bien apretado-. Por fin puedo abrazarte querida sobrina.

De pronto un nuevo pensamiento invadió mi cabeza, alejé lentamente mi cuerpo del de Artemis, miré hacia Derek y pregunté:

-¿Por qué David reconoció tu nombre si no se lo dijiste?

-Porque en conjunto con tus poderes, también adquirió recuerdos que te pertenecían. Además, como migraron de una mente a otra, se volvieron aún más vívidos que cuando eran tuyos.

-Entiendo totalmente. ¿Y Tristán?, ¿por qué no le he visto aún?, ¿saben algo de él?

-Tristán Frostwood está constantemente viajando, es conocido por lo humanos como Tristán Zarael Smith, el famoso actor de acción que no utiliza dobles.

-¡¿Es broma?! -Dije casi babeándome-. ¡Ese actor es guapísimo!

-Me imagino hermanita, que sabes que todos habitamos el mundo humano bajo otras apariencias.

-Entonces dime... ¿es más atractivo?, ¿está feo?...

-No deberías tomar en cuenta opiniones subjetivas, cuando tú misma puedes juzgar mi verdadera apariencia, amada novia.

¿Novia? Sentí que todo mi cuerpo se estremeció cuando oí esa voz profunda pronunciar aquella palabra. Lentamente me volteé, hasta encontrarme frente a frente con un chico de aproximadamente un metro y noventa y cinco centímetros de altura (asumí porque se veía más alto que Derek), tez blanca casi lechosa, ojos grisáceos y cabello negro azabache. ¿Es normal que los brujos tengan facciones tan definidas? Un mentón marcado y nariz perfilada. Definitivamente el chico que acababa de ver era mucho más atractivo que el famoso actor.

Estaba vestido con un pantalón de tela marrón, zapatos negros, un chaleco oscuro de cuello ajustado a su torso y un abrigo largo color camel. Totalmente mi estilo.

-¿Qué opinas ahora?

-Estás todavía más guapo que ese actor que sale en televisión. -Sonreí pícaramente-.