☽︎𝐈 𝐅𝐫𝐞𝐞 𝐘𝐨𝐮 𝐅𝐫𝐨𝐦 𝐘𝐨𝐮𝐫 𝐒𝐮𝐟𝐟𝐞𝐫𝐢𝐧𝐠☾︎

✵𝑫𝒆𝒔𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒊𝒅𝒐𝒔✵ 𝐜𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 1

                        -I'm too sad to cry, too  high to get up-

-¿Eh? Oh ¿Estoy muerto?- Pensó. Se encontraba tirado en medio de la nada. En una oscuridad densa, que lejos de ser abrumadora era acogedora. -¿Así se siente estar muerto?- tranquilidad, tranquilidad es lo que abunda en este lugar -¿Esta era su muerte al fin?, ¿al fin funcionó?- Todo está repleto de oscuridad y una inmensa tranquilidad, ¿así se siente estar muerto? La paz que esto generaba comenzaba a gustarle. Las personas solían afirmar que la muerte es aterradora, que en ella solo hay sufrimiento; pero, si perciben lo que él está viendo en este momento, la paz que reina en este lugar, comenzarían amarla...-

          -Don't even try cause I'm scared to fuck up

           Don't like to talk, I just lay in my bed-

-Shoto... Shoto...- Una voz ronca y masculina comenzó a sonar por todo el lugar. Llamando al joven, se desconoce el paradero de esta voz misteriosa.

-¿Eh? Una voz Una voz me está llamando. ¿Quién es? Parece provenir de allá.- Esa voz parecía reconocerla. Le es tan familiar aquella voz - ¿Quién es?, ¿de dónde proviene?, ¿por qué le llama? ¿Es acaso su guía espiritual?- Preguntas inundaban su mente, no comprendía el porqué de su llamado

El chico, en busca de saber más sobre este lugar, explora un poco con la mirada. Al curiosear en la inmensa oscuridad, lo único que podía ver en aquel lugar, es esa misteriosa voz que seguía llamando por él.

-¡SHOTO TODOROKI!-

Ante aquel grito, el bicolor se sobresaltó, incorporándose de la cama en la cual se encontraba antes. Al tratar de ver dónde se encuentra, su vista se ve forzada a cerrarse y esperar un momento para acostumbrarse a aquella luz que inundaba la habitación. Una vez acostumbrada a esto, examinó el lugar, buscando saber dónde se encontraba, solo para percatarse de que era su habitación. -¿Qué?, ¿mi habitación?- El bicolor, lejos de estar sorprendido, se encontraba decepcionado ante aquel descubrimiento. —Mierda Otra vez no funcionó...- murmuró cabizbajo. la cuarta ocasión, por no decir más, que trataba de apagar su vida. Pensamientos llegaban a su mente. - ¿Cuál era la razón de que no funcionaba? ¿Por qué persistía despertando? ¿Se trataba de un castigo divino acaso?

-¡Shoto!- La misma voz que en su sueño le llamaba, se volvió a escuchar, haciendo que perdiese el hilo de sus pensamientos. Ante aquel grito nuevamente se sobresaltó, al posar su vista en la puerta, aun estando está cerrada, reconociendo aquella voz. Estaba a punto de contestar, hasta que un fuerte dolor de cabeza lo hizo parar.-

-Gave me some pills, but I'm too scared to take 'em.-

-Hasta que al fin despiertas. Papá, no ha dejado de gritar tu nombre.- -Una voz infantil se hizo escuchar a su derecha. Al girarse para descubrir el origen de esta, se encuentra con un niño de aproximadamente 10 años, quien lo observaba con clara molestia.-

- Itazura-kko, ¿qué haces...-

Antes de poder formular su pregunta, se ve interrumpido por aquella voz infantil.

-¡Duermes como una roca!- Alzo el pelirrubio. -¡Fue tan difícil despertarte!, ¡ni golpeando tu rostro logré levantarte! —Quejó el oji-azul. Despertar a su hermano sí que era difícil.

-JA, JA, JA- Una carcajada inundó el lugar. Siendo el chico el causante de esto. -Lo siento. Es que tuve un sueño tan plácido, que no pude evitar querer dormir más.- Respondió. -Si tan solo fuera verdad—murmuró, aunque más para sí mismo. Sin ser escuchado por aquel niño.