Enamorado del CEO

El CEO perdió su calma

Capítulo 109
El CEO  perdió su calma

A las siete y media, Lee Jimin se presentó a tiempo en su oficina. Era el
primer día en el que Joon Tan iba a trabajar aquí, por lo que Jimin tendría que acompañarle y darle una presentación de la compañía por una media hora.

Después de que el se sentó, pronto alguien llamó a la puerta. El dijo: —
¡Adelante! —Luego puso sus cosas personales en la caja de su escritorio.

Era Joon Tan, con un traje rosa y un abrigo largo y blanco. Llevaba la insigna de practicante, y el cabello rojo rizado colgaba sobre los hombros.
¡Pintando sombras rosadas de ojos y labio rosado, se veía hermosa y encantadora!

—Joven Lee, ¡es un honor trabajar con usted! —Joon Tan se puso
recto de pie, mirando al Joven delante de ella. Lee Jimin llevaba una blusa
blanca, pantalones largos y sueltos y zapatos de cuero blancos con tacón alto. Su corto abrigo negro se acostaba sobre la silla.

—A mí también. Ayudaré en los trabajos siguientes —Ven y pregúntame por cualquier duda que tienes —Con su teléfono en la mano, Lee Jimin salió primero de la oficina, mostró a Joon Tan la situación de la compañía y le explicó en detalle la distribución del departamento.

Cuando llegaron al primer piso, se chocó con JungKook, que acabababa de entrar a la oficina de afuera.

Había una clara huella de mordida en su labio. A Lee Jimin le molestaba
cuando recordó lo que había pasado la noche anterior. Pero el aún lo saludó: — ¡Buenos días, señor. Jeon!

Los ojos de Joon Tan se iluminaran de inmediato al ver a JungKook. ¡Pensaba que era una buena opción trabajar en el Grupo SL, donde podía ver al guapo JungKook todos los días!

¿Pero, el labio del Sr. Jeon fue mordió por alguien?

Inconscientemente, miró a Jimin, quien parecía no saber nada de lo
pasado y saludó: —¡Buenos días, Sr. Jeon!’ Saludó como Jimin.

JungKook solo le echó un vistazo a Joon y asintió con la cabeza antes de caminar hacia el ascensor, con una cara de póker. Esto hizo a Jimin un poco avergonzada. Recuperó su calma y siguió presentando la planificación y el desarrollo de la compañía a Joon Tan.

Joon Tan se dio cuenta de la expresión extraña en el rostro de Jimin y
miró al hombre que acababa de pasar. ¡Ella era consciente de que algo había sucedido entre ellos dos!

A las ocho y media.

Ya era hora de la reunión diaria. Jimin caminó hacia el ascensor con
algunas carpetas en sus manos.
La puerta del ascensor se abrió, y se vio que JungKook estaba parado sin
expresión con Tae Hyung a su derecha y Joon Tan a la izquierda, quien estaba conversándose con JungKook.

Al ver esto, Jimin se quedó rígido, fingiendo estar revisando las
carpetas. Estaba esperando el cierre del ascensor para poder tomar el siguiente.

—¿No entras, Joven Lee? —Preguntó TaeHyung, pensando por qué no
había entrado.

Jimin lo miró y sonrió. —No ahora. Estoy esperando a alguien, puedes irte primero.

En el último momento, antes de que la puerta del ascensor se cerrara
lentamente, sintió una mirada helada directamente lanzada hacia el como una espada afilada.

Vio que el ascensor bajaba poco a poco. Llegó otro ascensor y el entró
corriendo.

YoungSoo, el nuevo subdirector general, estaba dentro del ascensor. Al ver a  Jimin, él asintió levemente, —¡Buenos días, Joven Lee!
Jimin respondió con una sonrisa: —¡Hum, buen día!