Hola! ¿Qué tal? Lo prometido es deuda, espero no haberlos hecho esperar mucho. Me alegra saber que el Nomae tiene tantos fans y sobre todo que les esté gustando el fic. Quizás demore un poquito en subir el siguiente capítulo, pero no será por mucho tampoco, espero lo disfruten!
~
A la mañana siguiente, Mae se levantó primero, tratando de buscar algo para comer. No sin antes voltear a ver al simio de ojos verdes, quien dormía muy apacible y tranquilamente, al verlo así le transmitió una rara sensación de paz, le agradaba ver qué Noa se encontraba calmado sin esa expresión de preocupación que mayormente tenía, debía admitir que le disgustaban de por sí los simios, pero Noa tenía algo que llamaba mucho su atención, no sabía describir eso como una especie de conexión, no tenía manera de como describir esas emociones.
Mae volteo la mirada y se dirigió hacia su cometido, no sin antes percatarse de que unos metros más allá había un riachuelo, quizás estaban cerca a algún río, eso la animó mucho, quería hace ya muchos días atrás darse un baño, el sudor y el mal olor se le habia impregnado hasta en lo profundo. Una parte de ella se avergonzó por imaginar que pensaría Noa del aroma que desprendía, pero por otro lado quito ese pensamiento de ella rápidamente, era estúpido pensar eso, no debía de importarle.
~
"Noa despierta" "Despierta amigo, Mae no está" Noa sintió las palmaditas de su amigo y se sobresalto despertandose, por extraño que fueran ya aún más las cosas estaba soñando con la Eco Mae, y justamente en ese sueño Mae le pedía a Noa que tomara su mano y la siguiera para mostrarle algo, Noa la seguía y podía sentir los suaves que eran esas manos y lo pequeñas que eran en comparación con las suyas, esa textura le causaba una gran electricidad, era como un imán de lo más atrayente.
Estaba pasmado en su sueño, hasta que pudo visualizar en otro escenario como a Mae le había crecido el vientre, y como ella posicionaba su mano en el para que lo acariciara, Mae le sonreía muy dulcemente, tanto que derretía tan solo con ese gesto su aturdido corazón.
Y eso fue todo lo que Noa pudo recordar.Estaba pasmado con el sueño, ¿Acaso ese vientre abultado era debido a que Mae estaba embarazada y de ser así...de quién? Fue lo más sorprendente y extraño que había soñado, sin embargo cuando volvió a la realidad cayó en cuenta de lo que le dijo Raka, que Mae no estaba, eso lo alteró y su expresión de preocupación se dió a revelar, cuando ya estaba a punto de salir en búsqueda de ella, Raka lo detuvo y le dijo que era broma que ella estaba unos metros más allá tomando agua y buscando comida.
Noa lo miro disgustado y enojado a lo cual Raka solo río y chilló de emoción.
"Ves, te dije que ella te importaba más de lo normal amigo"
"Disparates" Noa hizo una seña con la mano al mismo tiempo que volteaba los ojos "Ya no molestes" Raka solo siguió riendo.
En eso se percataron que Mae se estaba acercando a ellos, traía consigo unas frutas. Noa se percató que el rostro de Mae estaba más limpio, dejando ver más sus facciones delicadas, no se podia imaginar como se vería si estuviera completamente limpia, en eso se acordo de la apuesta con Raka que habían hecho por la noche y automáticamente bajo la mirada. Habían sido solo un par de segundos casi a punto de perder la apuesta.
"Hay al parecer un río un poco más allá" "Podríamos quizás pescar algo" Anuncio Mae rompiendo el hielo, Raka le sonrió "Vamos entonces, hay que comer bien, tener energía"
Todos se dirigieron metros más allá, Noa en su lugar sin decir palabra alguna comenzó a pescar a penas llegaron, quería en lo posible dejar de pensar en Mae o querer siquiera verla.
Raka por su lado pidió ayuda a Mae para hacer una pequeña fogata y poder cocinar el pescado.
"Mae, quizás puedes aprovechar en bañarte" "Hará buen clima hoy"
Mae volteo a ver a Raka y le sonrió ligeramente "Eso estaba pensando hacer"
ESTÁS LEYENDO
Unión del Sol °
RomanceNada era casualidad. Todo se daba por algo, y el encuentro entre Raka, Mae y Noa no era pura coincidencia, pero Noa jamás imaginó ni en sus más descabellados sueños que su viaje estaría lleno de aventuras y mucho menos junto a un Eco, a una humana l...