Nuestra Familia (Chestappen)

El novio de Charles

El problema con Patricio había quedado brevemente pausado.

La única conclusión a la que habían llegado es que Pato quería hacer algo, Max no lo quería y Sergio lo apoyaba.

Max les había dicho a todos sus hermanos un rápido: "hablaremos de esto con más calma mañana" y todos se habían dispersado por la casa a regañadientes.

Pato había corrido de inmediato a su habitación a llamar a Lando para contarle todo y preguntarle cómo le había ido a él. Y había quedado claro que Max estaba ligeramente enfadado con él, pero lo perdonaría una vez lo hablarán.

Ahora era su turno.

Y el de su papá Max.

Ahora era el momento en que ambos lidiaran con las consecuencias de ocultarle algo a su papá Sergio.

Charles se sentía diminuto bajo la severa mirada de su padre mientras estaba de pie frente a él.

Charles siempre había sido su dulce niño de ojitos verdes, su príncipe al que siempre le cumplía todos sus caprichos pese a que Charles no era un niño caprichoso.

Pero, sobre todo, Charlie era su bebé.

Sergio tendía a ser especialmente sobreprotector con él desde que nació por lo mucho que le recordaba a Max.

Entonces Charles se había vuelto el hijo dorado de papá.

Nunca nadie lo decía, pero todos los sabían.

Y nunca eso le había calado tanto como ahora.

—¿No vas a decir nada? —su voz gélida, dura, diferente.

Nunca le había hablado así.

Charles se sintió diminuto bajo su mirada, así que Max intento ayudarlo, abrazándolo por los hombros.

—Michel...

Su papá Sergio lo silencio con una mirada mortal que Max comprendió de inmediato, apretando más su agarre sobre sus hombros.

—No. No quiero escuchar palabrería, quiero ir directo al punto —le aclaró con voz firme a su esposo, causándoles un escalofrío a los dos.

Recordandoles una vez más porque no era bueno ocultarle nada a su papá Sergio.

—Papá... —intento decir Charles, pero se detuvo de inmediato cuando la atención de su padre recayó completamente en él.

No sabía que decir, honestamente no sabía cómo comenzar.

Ya había predicho que sería difícil, pero no había imaginado cuánto.

—Es que no lo entiendo, Charles, ¿Por qué no me lo dijiste?

El castaño bajo el mentón, afectado por el tono acusador de su padre.

Max al verlo, le dirigió una de sus miradas recriminatorias a su esposo.

Al parecer, las discusiones no habían terminado aún.

—¿Y como esperabas que lo hiciera si sabía que te ibas a poner así? Es un muchacho joven, Sergio, no puedes esperar a que te esté pidiendo permiso para todo.

Las cejas de su padre se apretaron más si es que era posible, mirando con indignación a su esposo.

—Pero miren quién habla. ¿No acabas de hacerle un berrinche a Pato porque quiere ser alguien que tú no quieres?

—No intentes comparar las situaciones, esto es totalmente diferente, Michel. Lo de Pato es un tema aparte. Charles no está haciendo nada que ponga su vida en riesgo.