Tomo VIII: ''Aprendiendo a ser... ¿Héroe?''

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Entre los árboles de un bosque para campamentos, Tetrax miraba al horizonte de brazos cruzados. Cerca de él, una pequeña cueva descansaba mezclada con el ambiente verdoso que ofrecía el lugar. Y desde su entrada, emergió Gwendolyn, bostezando un poco y dejando que su pelo lacio ondeara con el leve viento.

- Buenos días...

- Hmn - el alien volteó por un segundo - . Buenos días.

- ... - mirando alrededor, ella levantó una ceja - ¿Dónde está Ben?

Tetrax no respondió, todavía observando al frente. Desvió su mirada a su muñeca, donde un pequeño cronómetro corría.

- Casi dos minutos...

Antes de que la adolescente pudiera repetir su pregunta, un ruido lejano los alertó. Lejos en el horizonte, una nube de polvo crecía y se acercaba cada vez más...

- Niña. Muévete.

Haciendo caso a pesar de su curiosidad, Gwen fue testigo como en un abrir y cerrar de ojos la nube de polvo estaba a su lado, seguido por el ruido de un golpe seco y un quejido.

En la entrada de la cueva, una criatura delgada acariciaba su cabeza mientras se levantaba. Parecía un lagarto, y el final de su cola rayada se separaba en dos. De pronto, lo que parecía ser una máscara en su cara se levantó dejando ver su rostro.

- Ugh, eso dolió...

- Dos minutos cinco segundos en ir y volver a la capital- Tetrax se acercó -. Tu velocidad es superior a la de un Kineceleran normal, eso es seguro.

- ¿Kinequécosa? - el alienígena parpadeó - ¿Así se llaman?

- Así se llama su especie - Tetrax se esforzó por ignorar a Gwen, quien trataba de tocar la cabeza de su primo transformado que ondulaba como si tuviera vida propia -. Son conocidos por su velocidad... Pero en tu caso, es tanta que no puedes frenar bien al parecer.

- ¡Sí que puedo!

El cazarrecompensas levantó una ceja y señaló con un dedo como el suelo de tierra estaba marcado de negro por la fricción de sus intentos.

- ... - Ben se cruzó de brazos -. Bien, todavía no lo tengo dominado.

Como signo de apoyo, Gwen le dio unas palmadas.

- Por ahora es suficiente - dándose la vuelta, Tetrax guardó el cronómetro tras tocar un botón en su brazalete -. Creo que es hora de guardar todo y seguir nuestro camino.

Ante esto, Ben sonrió, y antes de que alguien pudiera agregar algo más, una ráfaga de viento atravesó todo el campamento: en menos de 10 segundos, todas sus pertenencias estaban apartadas como si nunca se hubieran usado. El alienígena dio un pulgar (¿garra?) arriba, con una sonrisa de suficiencia.

- Te tengo cubierto.

Con una imperceptible sonrisa, el cazarrecompensas y la chica recogieron todo con su ayuda. Sin embargo, Ben todavía permanecía como alienígena, lo que llevó a Gwendolyn a hacer una pregunta.

- Uh, ¿no puedes volver a ser humano por tu cuenta?

Tratando de agarrar unas ollas con sus garras, Ben las dejó caer con rabia y suspiró.

- Tengo que esperar hasta que esta cosa se le acabe el tiempo... O la energía. Oye, Tetrax, ¿esta cosa usa tiempo o energía?

- No, no - ella interrumpió antes de que el otro pudiera responder -. Quiero decir, ¿tienes que esperar? No puedes... No sé, ¿destransformarte manualmente?

Héroe de las Leyendas - Ben 10 Legends: Arcanematrix AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora