¿Esto es de dos o de tres?

Capítulo 5

~April~

•En el anterior capítulo...•

"Ellos se adelantaron unos quinientos metro hacia adelante. Entre dos árboles, pegado a una pared de rocas enormes, se encontraba un gran montón de ramas cubiertas de musgo verde, varias setas y cientos de hojas de colores marrones.
Y justo ahí, Dereck colocó sus manos en dos robustas ramas caídas y las levantó. Descubriendo así, que esas dos ramas formaban una puerta.

Ahora empezaba lo bueno..."

La improvisada puerta daba lugar a una mediana y extraña cabaña de madera. No logramos ver demasiado, así que decidimos acercarnos un poco más.

Vi el interior de la no acogedora cabaña. Numerosas estanterías de madera oscura colgaban de las paredes laterales. Estas estaban repletas de todo tipo de aparatos electrónicos. Desde móviles hasta televisores.
En total unas 11 estanterías en cada pared.

-¿Pero que cojones...?-se aventuró a decir Ian en un susurro.

Mal momento. Mala suerte. Lo callé propinándole un fuerte golpe en la cabeza.
No murmuró palabra.

Seguimos observando el interior mientras Cassie y Dereck revoloteaban en la habitación colocando más material y mantenían, por lo que de veía, una importante conversación.

-Deberíamos dejar de dar tantos golpes en un mes. Se darán cuenta de que somos nosotros, Dereck.-logré oír.

Mi supuesto mejor amigo, se encontraba colocando su pala en la pared del fondo. La cual estaba repleta de utensilios similares. Palas, picos, cuerdas, rastrillos y...¡¿una pistola?!

Esto se nos ha ido de las manos...

Bueno, orden en mi subconsciente por favor. Igual es de plástico, o de juguete...o igual no.

Intenté calmarme lo más posible, no era momento para estar histérica.

-No creo que debamos parar.-comentó largo rato después Dereck.-Si perdemos el hilo de los robos la gente ya no se asustará cuando nos vea.

Impactada. La única palabra que se me ocurre para describir como me encuentro.
¿Desde cuando estaban robando en la ciudad? ¿Y por qué razón?

Si mi vida tiene poca lógica ya de por si, ahora tiene menos.

-Bueno...Pues no sé que decirte...Ahora todo el mundo está al tanto de los robos inminentes que se producen semanalmente,-había oído hablar de ese tema anteriormente.-así que ahora la seguridad de casas, taquillas y tiendas será mayor. Por lo que deberíamos esperar a que se olvide un poco el tema y así bajarán de nuevo la protección.-soltó Cassie.

¿De dónde había sacado Cassie tanta inteligencia y astucia? ¿Dónde se olvido su estúpido tono irritante de diva?

Repito. Im-pac-ta-da.

-Tienes razón, pero hoy daremos nuestro último golpe, hasta dentro de unas semanas.-sentenció Dereck.

Había escuchado suficiente.

Me giré hacia Ian y lo vi ensimismado con la escena. Le toque suavemente el hombro y le hice una señal para irnos.

Caminé un par de metros hacia delante lo más silenciosa que pude. Si, silenciosa, yo sola. Porque Ian es tan torpe, que se tropezó con su cordón desatado y provocó un gran estruendo al caer.

-Shhhhh...-dije en un susurro de reproche.-¿Podrías dejar de meter la pata en los peores momentos?

A modo de respuesta simplemente puso una cara de culpabilidad.