Recuerdo con gran añoranza mis momentos de la infancia, adoraba montarme en los columpios del Kinder, me daban la sensación de que volaba por los aires.
– tal vez si le doy más impulso podré dar una vuelta completa – dije en un tono baja mientras me mesía en un columpio.
– ¿en que tanto piensas Luna? – preguntó una voz con tono infantil a mis espaldas.
Al voltear me di cuenta de que era Karina, una compañera de clases, de cabello y ojos marrones, con una piel ligeramente tostada.
No recuerdo casi nada de mis compañeros, siempre cuando intento pensar en los momentos donde jugaba con ellos quedaba en blanco, no podía poner voz o cara a ellos, solo se me venían a la mente los momentos donde jugaba sola.
– hola Karina, ¿Como estás? ¿Quieres jugar conmigo?– pregunte con una gran sonrisa, solía jugar a las muñecas con ella algunos días. El lunes pasado jugamos a que teníamos que curar a unos bebés, fue tan divertido.
– claro, ¿A qué jugamos?– preguntó con un tono curioso la pequeña morena.
– ¿Que tal si jugamos a las atrapadas?– dije con un tono dudoso, no se me venía a la cabeza que más podríamos jugar.
– sueno bien, ¿Quien empieza primero?– preguntó Karina con una cara pensante.
Me acerqué rápido a ella y le toque la punta de la nariz con mi dedo índice, exclamando en voz alta –!!!Tu¡¡¡– sin darle tiempo a reaccionar, empezé a correr alejándome de ella.
Tomó menos de un minuto para que reaccionara y empezara a correr detrás de mi riendo.
–!eso es trampa Luna¡– gritó Karina riendo mientras corría detrás de mí.
Me encantaba jugar con otros niños, en casa, casi siempre jugaba sola, soy hija única, mis abuelos estaban muy viejos para jugar todo el Tiempo conmigo y mis padres trabajan, no tenian tanto tiempo para mí.
De vez en cuando, mis primos nos visitaban para ver a los abuelos. Cuando jugábamos éramos tremendos jajajajaja. Solíamos meternos en muchos problemas.
Karina estaba a punto de alcanzarme, cuando fuimos repentinamente detenidas por el grito de una de las cuidadoras –!!! NIÑOS, EL RECREO TERMINÓ, ES HORA DE COMER ¡¡¡–
– rayos, un poco más y te alcanzaba Luna – dijo la pequeña morena dirigiéndose hacia el comedor –¿Que crees que den hoy?, espero que sea espagueti– añadió con una mirada llena de anticipación.
– yo espero que sea pollo con arroz, tengo muchas hambre– dije con un tono lleno de esperanza, mientras me sobaba la barriga con las manos cuando está de repente empezó a rugir – mejor nos apuramos y busquemos un lugar para sentarnos juntas Kari– añadí aumentando la velocidad de mi caminata hacia una de las mesas vacías.
– ok, pero espérame – dijo Karina corriendo hasta llegar a mi lado.
Extraño mucho esos tiempos, solo me preocupaba por comer, dormir y jugar. Pero sobre todo extraño cuando las tareas eran más fáciles, solo tenía que entregar una hoja con dibujos, ahora tengo que entregar trabajos de hasta 20 páginas de desarrollo.
Hasta aquí termina mi relato, tal vez mañana les cuente otro jejeje, que pasen buen día
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Eclipse
Short Storyla vida tiene un sin fin de cambios, los cuales nos van afectando poco a poco, tanto de manera positiva como negativa , pero al final, siempre conservaremos una pequeña porción de lo que fuimos en la niñez. Mi nombre es Luna y te invito a leer mi hi...