Eclipse

Primaria

En encanta ir a la escuela cuando era joven, pasar el tiempo con mis amigos era lo que más me encantaba. Esperaba con ansias el momento en el que sonara la campana para poder salir al receso y jugar con mis amigos.

– Entonces para poder despejar la X debemos..........– el sonido del timbre interrumpió abruptamente al profesor de matemáticas.

– Muy bien niños, continuaremos la clase después del receso – dijo el profesor con una pequeña sonrisa, aunque tenga una expresión seria la mayoría del tiempo, le traía una gran felicidad poder nutrir las mentes de sus pequeños alumnos.

Una joven de cabello largo vestida con una camisa manga corta de color blanco, junto con unos pantalones azul rey y unos zapatos negro (era el uniforme característico de la escuela), corrió hacia su amiga, teniendo cuidado de no tropezar con algún escrito.

Solia pasar mis recesos con mi amiga Verónica, era muy divertido. De vez en cuando llevábamos nuestros juguetes a la escuela para poder jugar con ellos en la hora libre. La escuela no tenía un patio de juegos, así que hacíamos diversas actividades para mantenernos distraídas y no aburrirnos.

– Vero, Vero, adivina lo que traje – dije con energía una ver que me encontré en frente del escritorio de Verónica.

Vero era una niña  linda de tez oscuro, que le gustaba mucho usar 2 colitas en el cabello, ella era un Paco más alta que yo y disfrutaba de las manualidades al igual que yo.

– dejame ver........mmmm.........¿Será otro paquete de calcomanías para tu colección?– pregunto la niña de colitas frunciendo el seño tratando de adivinar la sorpresa de su amiga.

– No, pero tengo algo mejor – Dije sin bajar mi ánimo y con una gran sonrisa – !!!Tan Tarán, plastilina¡¡¡– puse el frasco mediano de plastilina de color rosa encima del escritorio de Vero, presentándola como si estuviera ofreciendo un producto.

Jajajaja, recuerdo el día cuando mi mamá me había comprado la plastilina como un regalo para el día del niño, solía sorprenderse cuando hacía figuritas de animales, decía qué se parecían mucho a los animales de los cuales me basaba jajajajaja.

– Genial, ¿que tal si hacemos una competencia? – dijo Vero con ánimo –quien puedo hacer la figura más linda gana, la perdedora le tendrá que comprar a la ganadora un helado de la cantina –

– !Hecho¡ – dije con determinación, no estaba dispuesta a perder.

Algunos dicen que cuando te diviertes, siempre habrá ese alguien que quiere arruinarte la diversión....................y ese alguien era una compañera de clase que se entretenía jodiendole la vida a los demás.

– TERMINE–
– TERMINE–

Gritamos la dos al mismo tiempo, felices de como quedaron nuestras figuras de plastilina.

– Que lindas, déjeme ver cómo quedaron – dijo uno voz cargada de sarcasmo, con un movimiento rápido, el intruso tomó mi figurita con una mano y la aplastó – Ups – dijo en un tono burlón.

– !¿QUE RAYOS TE PASA SUSAN?¡ – pregunté con un grito cargado de enojo.

– No me pasa nada Lunita, solo quería ver cómo quedaron sus lindas figuritas, no pensé que se destruiría al momento en el que lo tocara – dijo con un fingido tono dulce, mientras ponía una cara de inocencia que ni Marte se creerían.

– Literalmente la aplastaste con la mano – dije con un seño fruncido, contenido las ganas tirarle un zapato a la cabeza.

– No sé de qué hablas, pero si me disculpas ir a comprar un jugo – dijo Susan llena de satisfacción, dirigiéndose hacia la cantina.

Estaba tan enojada, normalmente soy muy pacífica, pero a veces su actitud me saca de quicio.

– no le prestes atención a Susan, ella solo quiere fastidiarte – dijo Vero con un tono suave, tratando de calmarme.

– Está bien – dije soltando un suspiro – ¿Qué tal si reanudamos la competencia? – pregunté más calmada y con una pequeña sonrisa.

– Dale – dijo la niña de colitas feliz.

Les algo que aprendí sobre la vida, mientras crezca conocerán  personas que los acompañarán y apoyarán siempre y también encontrarán personas sin oficio que lo único que hacen en la vida es jodersela a otros.