❝𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐦á𝐬 𝐠𝐫𝐚𝐧𝐝𝐞, 𝐦𝐞𝐣𝐨𝐫 𝐞𝐥 𝐩𝐥𝐚𝐜𝐞𝐫❞
Desde que se supo que Lee Minho tenía una monstruosidad entre sus pantalones no había vuelto a tener alguna pareja.
Entonces... ¿Cómo era posible que Han Jisung estuviera con el?
¡¿Como...
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—¡Honey! —llamo Jisung mientras entraba al departamento de su novio.
—¿Qué pasó bebé? —pregunto Lee desde su sofá.
—¡No puedo creer que me hayas dejado con las ganas! ¡Eres un idiota! —Han hizo un puchero mientras se sentaba en el regazo de su novio.
—Te dije claramente que si te follaba en ese baño nos iban a descubrir, te recuerdo que todavía no puedes caminar bien cada que follamos, no me iba a arriesgar a que pensaran en ti desnudo — dijo Minho mientras posaba sus manos en la pequeña cintura de Jisung
—Pero hoy es viernes, tenemos todo el fin de semana, yo digo que deberías de coger —río Jisung mientras quitaba la camisa de Lee.
—¿Estas seguro de que quieres esto? Se suponía que este fin de semana iríamos a la feria que llegó a la ciudad, si lo hacemos no podremos ir.
—No importa, quiero que me hagas el amor así como a ambos nos gustas —Han comenzó a mover su trasero por encima de la tela que guardaba el miembro de Minho.
—J-Jisung... —Minho echo la cabeza hacia atrás mientras disfrutaba del movimiento de caderas de su novio.
Jisung bajo sus manos a hebilla del cinturón del pantalón de Lee, para bajar el bóxer junto el pantalón del contrario. Han se levanto para hacer lo mismo con su bóxer y pantalón.
Rápidamente Jisung volvió a acomodarse en el regazo de su novio con una sonrisa en su rostro mientras que llevaba su mano al miembro de Lee para acomodarlo en su entrada.
—¿Qué estás haciendo? Te vas a lastimar Jisung, deja te preparo corazón. —lo detuvo Minho antes de que comenzará a ingresarlo dentro suyo
—con lo de esta tarde y antes de llegar me prepare, no te preocupes —mintió —déjame hacer esto, no habrá ningún problema. —y con aquellas palabras Jisung comenzó a bajar por el miembro de Minho.
Jisung frunció el ceño mientras soltaba un quejido de dolor.
—Te lo dije, apenas entraste la punta y ya estás quejándose, ¿Por qué eres tan testarudo? —suspiro Minho mientras acariciaba la cadera de Jisung.
—E-estoy bien... —gimió Jisung mientras seguía bajando.
—Te vas a lastimar, deberías de parar.
—Si pude en nuestro primer encuentro, ¿Cuál es la diferencia ahora? —interrogó Jisung, para luego tomar aire y de un solo movimiento meter el pene de su novio lo más que su cuerpo podía —Ósea todo —
Minho giro los ojos, sabía que sin importar lo que dijera, Jisung no le haría caso alguno.
Ambos se quedaron quietos, Minho no se atrevería a moverse ya que sabía que sí lo hacía podía lastimar a su pequeño novio y eso sería algo que nunca se perdonaría. Y Jisung por su parte solo estaba esperando que el dolor bajara para comenzar a saltar sobre aquel exquisito miembro.
