— no hago lecturas gratis, soobin. — comienza a guardar sus cosas en su bolsa para marcharse, medio ignorando con esto la presencia del insistente rubio que no ha dejado su lado desde que la clase terminó. beomgyu se cuelga en el hombro su mochila y suspira. — ya te lo dije.
— por favor, beom. no es posible que seas tan tacaño.— aprovechando que sigue sus pasos detrás de él, el menor se permite sonreír ante esta última queja. soobin ha usado todas las palabras que conoce para hacerle saber que es un mal amigo por cobrarle.
— si le leyera las cartas a todos mis amigos de gratis— se detiene a mitad del pasillo, provocando que el contrario deje de caminar junto a él también. —, haría esto como pasatiempo.
— lo haces.
— sí, pero puedo cobrar. — lo ve poniendo los ojos en blanco y es entonces que se prepara para ser acribillado por súplicas nuevamente.
— ¡te lo suplico, maldito egoísta! sólo será una pequeñísima lectura. — ahora quien voltea la mirada es el castaño. no es que estuviera comenzando a doblegarse ante la insistencia tan arrolladora de soobin (aunque quizás...), sino que su mayor siempre tenía algo para hacerle cambiar de opinión. por esta razón beomgyu a veces terminaba haciendo cosas que no le gustaban; sólo por soobin.
— no te cobraré mucho, entonces.— nota como su mirada se endurece y, finalmente, llega a este punto que había estado evitando con tantas ganas; se rinde. — bien, maldita sea. voy a leerte las cartas gratis, ¿feliz?
y la sonrisa satisfecha en su rostro debería enfadarle, porque si hay algo que le pone la sangre caliente a choi beomgyu eso es, definitivamente, perder dinero tan tontamente; pero el sentimiento nunca llega. beomgyu se recrimina mentalmente por ser tan condescendiente con soobin todo el bendito tiempo.
— bastante.
una vez dentro del salón que ya se encuentra completamente vacío por la hora, beomgyu siente como soobin mira atentamente cada uno de sus movimientos y es inevitable para él no sentirse un poco nervioso por esto. claro, él y soobin han sido amigos desde años atrás y han estado solos en muchísimas ocasiones antes de esta, pero beomgyu simplemente no puede ignorar eso que ha comenzado a crecer dentro de sí cada vez que está con el rubio. en parte esta era una de las razones por la cual había estado tan reacio a leerle las cartas al mayor; había estado insistiendo una y otra y otra vez esta última semana y beomgyu siempre le daba la misma excusa (la cual era, sólo parcialmente, cierta). pero, tenía que permitirse ser sincero al menos consigo mismo, él definitivamente no quería saber cómo se vería la próxima pareja del chico que le gusta.
— ¿qué quieres saber? — murmura casi tan bajo que incluso podría pensar que no lo habría escuchado, pero sabe por la mirada obvia que le da que lo ha hecho. barajea las cartas tan rápido como puede, sólo para que soobin no se dé cuenta de que está temblando.
— sabes lo que quiero saber. — y es lo único que le dice antes de inclinarse un poco sobre el escritorio, curioso por escuchar lo que beomgyu tenga por decirle. mira las cartas que deja el menor frente a ambos aunque no sabe lo que ninguna de estas significa; espera pacientemente a que diga algo mientras lo ve frunciendo el ceño. — ¿qué pasa? ¿qué ves?
— veo... cabello negro... ojos marrones... alguien con mucha energía y extrovertido... no te va a agradar mucho al principio, pero van a llevarse bien con el tiempo...— sigue sacando cartas y se pregunta internamente si no estará pensando cosas que no son, el rostro que aparece en su cabeza al pensar en todas estas características le hace sentir unas náuseas abrasadoras. pasa saliva. — ropa oscura... risueño y... veo computadores...
— ¿computadores? — asiente bajo su tono claramente confundido. soobin también frunce el ceño, parece no saber qué decir ante lo que acaba de escuchar. al juzgar por su reacción, beomgyu asume que esto no es precisamente lo que le habría gustado oír. — ¿eso qué significa?
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¿qué tan nerd eres? ★ beomjun
Randomdonde beomgyu es tarotista y en una de sus lecturas ve en las características de su próxima pareja unas muy parecidas a las del presidente del club de informática, choi yeonjun. 𝟬𝟴𝟬𝟲𝟮𝟬𝟮𝟰 © 𝗺𝗶𝘇𝗲𝗿𝗴𝘆𝘂