¿qué tan nerd eres? ★ beomjun

uno. ★⋆˙

— ¡choi yeonjun! — pero taehyun realmente no está muy seguro de saber qué decir, sobre todo cuando ve a un aparentemente muy inquieto beomgyu que se desordena el cabello y da vueltas por todo el salón con desespero. se cansa un poco sólo de verlo. — ¡vi a choi yeonjun en las putas cartas, tae!

— ¿estás seguro que...? — pero prefiere cambiar su pregunta cuando se vuelve a mirarlo. taehyun llega a la conclusión de que beomgyu podría estar realmente volviéndose loco. — quizás no era él.

— sí, quizás...— no lo toma muy en serio desde que lo ve mordiéndose las uñas, nervioso o tal vez pensativo. taehyun sólo puede abstenerse a observar al mayor detrás del escritorio, ahí donde está seguro en caso de que diga algo fuera de lugar y lo quiera atacar. — quizás podría ser otro presidente de otro club de informática.

— beom...

— y esa no es la peor parte,— se inclina hacia él sobre el escritorio, taehyun reacciona echándose hacia atrás en la silla por lo repentino de su acción. — ¿sabes cuál es la peor parte? ¡¿lo sabes, taehyun?!

— dime cuál es la peor parte. — y su tono aburrido no es porque no le importe, sino que este tipo de reacciones son tan usuales de parte de beomgyu que simplemente se ha acostumbrado a ellas. él siempre dramatiza todo.

— los signos. — una vez más esa tarde, taehyun no sabe qué responder cuando las palabras de beomgyu se sienten tan poco concisas.

— ¿los signos? — pretende comprender cuando asiente, aunque debe pensar un poco. — pero tú y soobin no tienen el mismo signo...

— claro que no, pero...— un poco más calmado (al menos al parecer) se sienta en la silla que ha puesto de su lado del escritorio. — al leer las cartas normalmente se hace por grupo...

— ¿grupo de... signos? — otro asentimiento, y esta vez el menor parece estar genuinamente entendiendo. beomgyu sólo espera que haya alguna otra opinión seguida de su "oh..." como respuesta. aunque sólo obtiene un poco ingenuo;— ¿entonces?

— el signo de soobin y el mío están en el mismo grupo. — por un momento, el rubio sólo le mira con el ceño fruncido, con una confusión que se percibiría a kilómetros de distancia. al menos hasta que parece caer en cuenta de algo que no estaba poniendo sobre la mesa hasta hace poco; beomgyu se da cuenta por cómo sus ojos se abren de repente.

— oh... entonces... ¿yeonjun podría ser... podría ser tu próximo novio? — lo chistea con tanto desespero que su reacción toma desprevenido a taehyun, a quien le sorprende un poco su repentina interrupción.

— ¡no vuelvas a decir eso!

— pero...

— ¡ni una sola vez! — entonces taehyun no menciona nada más al respecto. aprieta los labios, pensando en el problema que podría conllevar que esto que beomgyu le ha estrictamente prohibido decir sea real.

— bien... ¿qué hay con eso? — y ahí está de nuevo esa mirada de obviedad (combinada con un poco de paranoia histérica) que le asusta. en serio, beomgyu en este momento es como un perro rabioso y cualquier cosa podría llevarlo al límite.

— ¿no lo entiendes? — taehyun prefiere no responder, porque no lo hace. se abstiene a ver al castaño apretando su cabello entre sus manos, preocupado, al parecer. — choi yeonjun no puede ser mi próximo novio... ¡mucho menos el de soobin! es un puto nerd...

— ¿y por qué no intentas ser un poco más escéptico esta vez? — esto que le dice, por primera vez desde que su conversación comenzó, parece calmarlo de repente. sus facciones se relajan y suelta los mechones que tiene aprisionados entre sus dedos.

— ¿escéptico? — asiente. — ¿en qué sentido?

— bueno... esto que haces de leer las cartas y ver el futuro y esas cosas es genial— parece dudar un poco- quizás reacomodando sus palabras lo más amablemente posible en su cabeza antes de decirlas. —, pero... esas cosas se pueden cambiar, ¿no?

— sí... continúa.

— podrías decírselo. — a beomgyu le toma casi un minuto comprender a lo que se refiere. ¿decirle qué a quién? ¿a yeonjun sobre lo que vio? ¿a soobin del escepticismo de las cartas? o...

— ¡¿decirle a soobin que me gusta?! — el menor apenas ha abierto la boca cuando el sonido de la puerta abriéndose lo interrumpe, llamando de inmediato la atención de ambos. ellos no sólo se quedan helados porque su conversación ha sido cortada justo en la parte menos conveniente, sino, también, porque la persona que ha entrado al salón no es precisamente a quien les habría gustado encontrarse.

beomgyu pasa saliva. y no sabe si esa sensación abrasadora se deba por la reciente idea de taehyun (idea que, claramente, ni siquiera consideraría llevar a cabo) o por quien está viendo.

— lo siento— ambos ven a yeonjun apretando su mano en el pomo de la puerta, alejando sus ojos de ambos desde que el ambiente con su presencia se siente evidentemente incómodo. —, creí que el salón estaba desocupado.

y tan rápido como ha llegado, simplemente se marcha una vez más. el silencio que queda una vez están nuevamente solos es casi igual de raro a como era cuando llegó.

— ¿crees que él...? — aunque no concluye su oración, ambos saben a lo que se refiere. ¿habrá choi yeonjun escuchado algo de lo que hablaron? beomgyu siente unas ganas mortales de golpear su cabeza contra la mesa del escritorio.

— estoy acabado, taehyun.