Mientras Cuentes Cuentos

Aw, ¿Esto es mucho para ti bebe?

Regulus x Theo

Regulus Black pocas veces dudaba de sus decisiones, asume las consecuencias de estas sin problema por más desagradables que puedan llegar a ser, pero en esos precisos momentos solo podría recriminarse a su mismo por haber aceptado cuidar a su sobrino Draco y a sus amigos en esa improvisada pijamada en lo que sus padres salían, claro que él esperaba que a los niños les llame más la atención la personalidad ruidosa de Sirius que la propia

Pero por lo que las dos horas que llevaba vigilándolos le demostró lo equivocado que estaba, por una extraña razón, y por extraña se refería al pequeño rubio, les gustaba tenerlo cerca

-Tío Reg tenemos hambre- la voz del niño castaño lo sacó de su monólogo interno- Queremos galletas

-No soy tu tío, am..

-Soy Theo- aclaro el infante confundido porque lo había llamado igual a como le llamaba Draco y no parecía molestarle- Pero él te llama así, te debes llamar Tío Reg

-Soy tío de Draco, puedes decirme Reg- aclaró tratando de no usar términos complicados- Y no pueden comer galletas, o tendrán pesadillas si es logran dormir

-¿Entonces podemos comer cereal Tío Reg?- apareció el rubio en la negociación cuando su amigo lo dejo demasiado tiempo solo- Prometemos portarnos bien y dormir a la hora que nos digas

- De acuerdo vamos- el menor de los Black sabía que no tenia mas opciones, por lo que les extendió la mano para guiarlos de manera segura al comedor- Kreacher- llamó una vez que llegó cargando a los niños para ayudarlos a sentarse en las sillas- Sírveles cereal para cenar

-!¡Orejas de murciélago!

Ambos niños se bajaron de las sillas emocionados por ver al elfo corriendo para tratar de alcanzarlo, cosa que Regulus recordó que Draco hacia bastante cuando recién aprendía a caminar, suspiro derrotado al ver a su elfo doméstico siendo perseguido

-Aw ¿Es mucho para ti bebe?- se burló Sirius paseando la vista entre su hermano su sobrino- Dos niños de 4 años pudieron contigo Regie

-Cállate Sirius- atino a decir cuando se dio cuenta que su hermano mayor salió de su habitación al oír los gritos de los menores