Libro II ||Saga Aeropuerto||
Dmitri Lébedev se ha entregado por el bien de su mujer, por la mujer que ama.
¿Ella se quedará de brazos cruzados sabiendo que su marido está en la cárcel?
Pues no Léa Colin tras describir que es una de las cabecillas qu...
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LÉA COLIN
Eiji, Eiji, Eiji.
¿Quién se atreve a hablarme así? ¿Un enemigo? Nunca he conocido a los enemigos de mis maridos ¿Este será el primero entre todos? Nadie sabe que yo soy mujer de ellos, es buen punto así no piensan que soy su debilidad.
—Léa —mi nombre hace eco entre toda la mansión.
Hemos estado en silencio por un largo rato, Leo y Joss se encuentran frente mío, Devin se encuentra detrás mío dando vueltas como un león enjaulado. Después de aquel espectáculo en Rusia tuvimos que tomar un vuelo que nos llevará lo antes posible a Francia para encontrarnos con Calvin y Carlos.
—Léa —ahora visualizo a Devin arrodillado frente mía tomando mis manos. —Meine Liebe ¿Sabes qué fue lo que sucedió hoy? —pregunta precavido.
Asiento levemente. —Ser una estúpida —inquieto llevando mis manos hacia mi rostro.
Escucho como él suspira. —No cariño, se porque lo hiciste y lo comprendo —Sujeta mis manos para quitarlas delicadamente de mi rostro, veo sus hermosos ojos viéndome con preocupación y un toque de ilusión, como amo sus ojos. —Pero ya no es momento de arrepentirse, hay que hacer lo posible para sacar al gorila de esa prisión —aclara.
—Pues yo ya traje el primer paso —la voz de Calvin hace que todos miremos hacia el umbral de la sala.
Una persona de tez morena y altura aparentemente alta aparece a un lado de Carlos.
—¿Léa? —escucho esa voz. —Por favor no me hagas nada, te ayudare con Dmitri te lo prometo.
Mis ojos se iluminaron con tales palabras.
—No le creas сердце —la voz de Damien inunda la habitación y juro que vi cono Devon temblaba.
—N-no es p-posible —el temblor de su voz lo decía todo.
Damien hace una señal que haga silencio y guiñandome el ojo, cuando quiere puede salirle la voz exactamente igual a la de mi Dmitri.
—Siempre estoy a un paso de ti Devon —sigue hablando.
—Te juro que lo de hoy no volverá a pasar, no es mi intención, no fue mi intención ofender a Léa —habla rápido.
Calvin y Devin lo ven mal.
Devin se acerca a él y le da un puñetazo en las costillas. —¿Qué hablaste de Léa, habla ya sapo? —veo que lo ve con ira.
Veo como Devon se queja —Sé que fue un error haber dicho que Léa es más hermosa en persona, solo que se me hace extraño verla, toda mi vida pensé que la única flor de Camil estaba muerta —habla.
Todos guardan silencio, veo como Denise se coloca unas lentillas grises en sus ojos para parecerse a mi Dmitri se coloca a un lado mio y sujeta mi cintura.
