Bowie y Raj se pusieron algunos abrigos por el frío que pudiera haber en tal lugar. Antes de salir de la casa, Bowie le preguntó a Raj un tanto confuso:
–¿Y Wayne?–
–¡Oh!, está en su casa, ¿Por?– le respondió un poco confundido.
–No, nada, esque pensé que vendría, o que al menos podría venir con nosotros a la pista de hielo.–Contestó.
–Oh, esque... Wow, no tengo idea, bueno, ¿Quieres que le pregunté si quiere venir?–
–Si tu quieres, está bien.–
–¿Estás seguro?–preguntó algo inseguro.
–Si, ¿Por qué no lo estaría?–el afeminado se estaba sintiendo un poco raro, ya que, ¿Por qué Raj le preguntaría si "estaba seguro"?
–No lo sé.–Contestó con un tono inocente.
El rubio dejó de hacerse preguntas después de la respuesta tan tierna e inocente que le había dado su pareja y decidieron terminar su conversación para poder ir al lugar.
Mientras iban al lugar de patinaje, los dos contaban cosas que les había pasado mientras ambos estaban en las suyas, y también trataban de ordenar por partes los lugares a los que irían, que, para ser sincera, fue algo difícil ya que no se ponían de acuerdo por cierto orden que sugería uno.
Al llegar al lugar, esperaron un poco en una fila algo corta, para poder llegar al mostrador. Al terminar de registrarse y todo eso, esperaron junto a otras personas a poder entrar, ya que había que haber cierta cantidad de personas en el lugar helado, además de que alguno adentro de ese lugar se le agote el tiempo y tenga que salir para que otros puedan tener el suyo.
Después de esperar un poco, por fin fue su turno de entrar, los empleados del lugar les dieron unos patines para ambos, al ponérselos, intentando de no caerse y agarrándose a las paredes y muebles, entraron al lugar. El lugar no era ni tan grande ni tan pequeño, las paredes tenían ventanas en las que se podían ver al otro lado, y en la parte de abajo de la ventana, dónde había superficie de la pared, habían barandales para poder agarrarse.
–Wow,–dijo Bowie–nunca había estado en un lugar así.
–¿Encerio?–
Bowie asintió con la cabeza.
–Bueno, pues, ¿Que te parece?–preguntó algo nervioso por saber si a su novio le gustaba ese lugar que el castaño tanto amaba.
–Bueno, es muy lindo.–le respondió.
–¡¿De verdad?!–preguntó entusiasmado.
–¡Claro!–
Raj al saber esto, se puso muy feliz como si fuera un niñito pequeño, algo que a Bowie le dió ternura y expulsó una risita.
Al entrar, el indio fue el primero en pisar el hielo, extendió su mano hacia el rubio para ayudarlo a poder bajar, aunque sea solamente un escalón. Cuando el morocho piso el hielo, se agarró fuertemente de su pareja, algo que obvio, Raj tomó por sorpresa.–¡Wow!, ¿Qué pasa, Bows?–preguntó un poco confundido.
–Esque... No sé patinar...–esto último lo dijo algo bajo.
–Tranquilo, no pasa nada, es más, te puedo ayudar.–respondió de manera tranquila.
–¿Encerio?–
–¡Pero por supuesto! No tengo problema.–el moreno realmente quería ayudar a Bowie en lo que fuera.
–Okey–le contestó aliviado, al saber que el hecho de que no supiera patinar no afecte su día con el castaño.
Raj iba ayudando a Bowie a patinar, enseñándole cosas simples para poder mantenerse de pie y patinar al menos un poco.
–¡Rajie! ¡No me sueltes!–
–¡¿Pero entonces como sabrás si puedes mantenerte de pie?! Para que puedas patinar, primero tienes que aprender a mantenerte de pie.–al decir esto, el moreno alzó su mano teniendo su dedo índice estirado, pero como estaba sosteniendo a Bowie y tuvo que soltar una de sus manos de el, el rubio se asustó un poco.–¡Rajie! ¡Te dije que no me sueltes!--exclamó asustado.
–¡Pero no te solté!–respondió con el mismo tono de su pareja.
Al pasar el tiempo, el morocho pudo soltarse lentamente, al punto de poder mantenerse de pie, algo que parecía imposible para el, y también de poder "patinar", por así decirlo, ya que en realidad ambos se agarraban de las manos y Raj avanzaba no tan rápido, para que pueda experimentar como trasladarse por el hielo, aunque a Bowie le aterraba ver como se movía cada vez más sobre el suelo helado, haciendo que pegue unos gritos del miedo, no tan fuertes,que hacían reír a Raj.
–¡AAAHHH! ¡Raj, no tan rápido, ya le eh dicho!–
–¡Pero ni siquiera estoy llendo tan rápido, eres tu el miedoso.–dijo entre carcajadas.
–¡Ey! ¡No te rías!–dijo el afeminado un poco molesto.
–¡Pero no es mí culpa de que tus gritos del miedo sean tan graciosos!–contestó mientras se reía.
–Y bueno, ¿Que esperabas? ¡Se supone que me estás ayudando! ¡No burlando!–respondió, un poco más molesto, pero a la vez jugando.
Raj se detuvo mientras se quedaba sin aira por tanto reír, se acercó a Bowie, aún con las manos de los dos agarradas unas entre sí, y le dijo, mientras lo abrazaba y consolaba de manera burlona.–Ya, ya, está bien, lo lamento, Bows.–soltó una leve risa.
–Idiota.–contestó tratando de ocultar su sonrisa.
–¡Ya! Dije que lo sentía, además, deja de hacerte el ofendido, es obvio de que te estás riendo.–
–¡No me estoy haciendo el ofendido! Lo estoy.–dijo, sin poder siquiera intentar ocultar su sonrisa.
–Y si no lo estás, ¿Entonces por qué estás sonriendo, huh?–respondió con un tono burlón.
–Que sonría no significa de que no esté molesto–contestó de manera juguetona.
–Si claro, lo dudo.–
–¡Oye!–esta vez, no pudo evitar soltar una risa.
Los dos tortolitos se empezaron a reír y a hacer conversaciónes juguetonas, mientras Raj seguía ayudando a Bowie a poder patinar.Después de que terminara su hora, salieron de ese lugar helado, se quitaron los patines, se los entregaron a un empleado, y salieron de ese lugar.
En el camino, conversaron de sobre como la pasaron en ese lugar frío, en especial sobre ese tan gracioso momento.
Al llegar a la casa del castaño, saludaron a Olivia, fueron al cuarto de y se desabrigaron para poder ponerse ropa cómoda.
En la cena, hablaron con la madre del moreno de como les fue en el lugar.–¡Y Bowie estaba gritando por el miedo!–habló entre carcajadas el indio.
–¡Pues por qué tu estabas llendo muy rápido!–exclamó el rubio.
–Oh, ¿Encerio? Supongo que debió de ser tu primera vez.–
–De hecho, si lo fue.–respondió.
–¡Pero por supuesto que lo fue! ¿Que no me oíste decir cómo Bowie gritaba por el miedo?–
–¡Oye!, ¿Acaso creías no tendría miedo?–le respondió al castaño fingiendo molestia.
–Claro que creía que ibas a tener miedo, ¡Pero no pensé que gritarías así!–contestó burlón.
La pareja tuvo una discusión en manera de broma, algo que Olivia no podía evitar escuchar y reír un poco.Al terminar la cena, los tres vieron un poco de televisión. Cuando se hizo más de noche, la pareja decidió irse a dormir, saludaron a la mayor y se fueron a lavar los dientes. Cuando terminaron, se fueron a la habitación del indio para acostarse y descansar.
–Oye, Bowie.–habló el más bajo.
–¿Qué pasó?–respondió el africano.
–¿Te gustó el lugar?–
–¡Claro! Fue muy divertido, no espero para saber que haremos mañana.–respondió sonriendo.
–Está bien, yo también me divertí, y yo tampoco puedo esperar para mañana.–La conversación termino ahí, ya que ambos estaban muy cansados.
En un momento, Raj decidió abrazar al afeminado, que el, al estar apoyado en su novio, y a la vez medio dormido, se acomodó mejor y le devolvió el abrazo, y así durmieron, los dos morenos abrazados unos a otros.♥︎
Bueno, hasta aquí el capítulo, la verdad, aunque haya sido algo corto (o al menos para mí), me costó mucho hacerlo 😭😭 pero tenía que aprovechar que hoy tenía el día libre, (esque falté a la skul 😋👍🏻) algo más, muchísimas gracias por todo el apoyo que está recibiendo esta historia y mí cuenta :D, puede parecer poco, pero a mí me emociona mucho, y nada, gracias 😸💗💗
ESTÁS LEYENDO
•♥︎~Tu y yo, yo y tu~♥︎•
RandomEstá historia es sobre la pareja gay más querida del reality show "TDI", después de varios meses de la final de la temporada 2 de "La Isla del Drama", llegan las vacaciones, haciendo que Bowie y Raj planearan algo que puedan hacer los dos juntos y q...