Capítulo 2.

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El confinamiento había empezado, Toey podía escuchar la lluvia caer mientras Pheem veía por la ventana cercana el sonido de las sirenas y los carros a mayor paso sobre la zona en que estaban.
No debían hacer mucho ruido, ni mucho menos extenderse con su olor porque todo se daría por perdido.

Lo comprendía porque, también había pasado por eso y ellos eran más que sobrevivientes que estar en un revuelo de problemas. No todo se veía oscuro, parte de ello las linternas a baja intensidad cubrían la sala, dónde Chain y Q mantenían la guardia a toda costa.

—Otra vez dañaran todo, los sembradíos del sur costaron en nacer la mayoría vivimos de eso. La han descubierto, llevan carros enormes. Estamos perdidos de nuevo...—

La voz de Pheem resonó, a lo que Pun suspiro.

—El delito de ellos, es pelear contra una naturaleza que no puede evitar renacer. Quieren que nos dé hambre, que estemos a su Merced siendo esclavos de cualquier gente...—

—Lo se, no sé si es seguro estar aquí en Chaing Mai—

Toey permaneció en silencio, sus manos se aferraron a una manta rogaba porque también su pandilla se ocultara y no creará problemas.

—Pattaya es buena opción, dice ser una población olvidada pero hay más habitantes ahí mi grupo y yo planeamos ir, pero decidimos pensar en alojarnos aquí un mes...—

—Tu grupo fue que le jodió las pelotas, al jefe por eso es que se ocultan en un mes borran su historial y pueden viajar sin que si cara sea reconocida—

—Creo que para opinar no debes estar hecho, Q así que cierra la boca que tú eres el primero en todo...—La voz de Pheem hizo que se encorvara como un cachorro.

—Pheem no es de salir, pequeño odia viajar desde la última vez...—

Pun tomo un poco más de su agua, antes de buscar una manta para poder acomodarse entre almohadas y edredones.

Toey podía sentir la mirada triste de Pheem a tan solo cerrar las cortinas, la lluvia seguía haciendo efecto como tal y con ello todo se volvió oscuro.

Iba a ser una noche larga.

Toey no pudo dormir, a pesar de que el lugar que tenía estaba cómodo. Q estaba aferrado a Pheem como si de verdad fuera un peluche, Chain no se quedaba atrás era como ver a dos cachorros abandonados.

Ahora entendía porque Fang esperaba siempre que durmiera, a pesar de sus fallas de insomnio y de porque Beer, Mick y Phum le tenían mucho respeto.

El silencio permanecía ahí.

Pun estaba cálido y aferrado a su manta, como otro cachorro desprotegido.

No sabía si era media noche, pero la luz de esa lámpara brilla a menos que antes.

—No te preocupes, no se darán cuenta cierra los ojos enano—La voz dormida de Q sonó al poder acomodar a Pheem entre sus brazos y alejando a Chain que solto un gruñido.

—Lo siento, me cuesta dormir...—

—Tengo alcohol y nicotina, puede ayudarte como no eres de tomar puedes caer en sueño o quedar en otras cosas...—Susurra en voz baja.

—No gracias, es muy amable de tu parte pero Phum mataría al cigarro si tan solo tocará mi boca...—

Q ríe un poco, veía como el pequeño se abrazaba así mismo.

Era como si el Omega, no estuviera acostumbrado a dormir solo.

—¿Pheem y tu son destinados?—

Q arqueo una ceja.

—Del hecho que lo abrace como si fuera mi Omega, no lo hace de la vista gorda pero no. Solo me gusta abrazarlo, no soy un lobo loco que lo ve de esa manera ...—

Pheem se movió un poco, regresando a su lugar Q quedó a la deriva y soltó un bostezo.

Toey suspiro.

—Dentro de unos minutos Chain se dejará cuenta, le hará compañía. ¿Quieres ir a la cocina y charlar?—

Tomando aquella linterna se levantó, con algo de fuerza ayudo a Toey a levantarse mientras le colocaba su manta para abrigarlo.

Al llegar a la cocina solo se veía unas sillas viejas de manera en la cual no dudaron en sentarse.

Y la lluvia parecía ser recia ante ellos.

—Perdon por no dejarte con tu pandilla, pero me gano el miedo...—

—Todos estamos así, pero mantengo mi palabra p'Q no le harán daño—

—Tal vez sea el empujón que nos obligue a salir de aquí...—

Toey permaneció en silencio.

—Se sobre ese lugar, pero Pheem se aferró a estar aquí y con tenerte aquí pensé que tomaría la opción de huir pero no...—

—¿Porque quieres sacar a Pheem de aquí? No entiendo...—

—Pheem tiene síndrome del nido vacío, es un Omega que crea un hogar luego de que...lo perdiera todo, a su pareja, padres, hermanos y cachorro...más su cachorro—

Toey quedó en silencio.

—No somos jóvenes como ustedes, pero cada uno tenía una vida. Pheem ya tenía una, hasta ese día...por eso está casa por eso nosotros y que se que ese viejo loco, ya está atacando terreno por terreno—

—Lo mismo paso con Fang...—

Q solo se aferró un poco más a la caja de cigarro que tenía en sus manos.

—Sea lo que sea, Pheem vio morir a su cachorro y a su hermano menor cuando llegaron aquí, simplemente no hay médico que lo ayude a tratarlo—

Toey permaneció en silencio.

—¿Quieres mi ayuda?—

A partir de esa pregunta, solo estaba la mirada de un alfa y un Omega dando a conocer su enlace.

Solo que, está vez su corazón permanecía ahí sin decir nada a cambio.

Instinto Maternal [Omegaverse] [We Are the series]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora