UNA MANZANA AL DIA mantiene alejados los peligros

CAPITULO 4: ¡NOS CASAREMOS AL AMANECER!

En su Emporio, bien vestida Omega reviso sus existencias. Acaba de cerrar la tienda debido a lo tarde que era y estaba soñando con una rica taza de té que iba a tomar cuando fue interrumpida por un ruido sordo detrás de ella.

Dándose la vuelta, recogió e inspeccióno la herradura que tenía delante "Que señal más curiosa", murmuró dejando la herradura sobre el mostrador y continuando con su trabajo.

No había pasado ni 5 minutos cuánto la despertó el sonido de su campana.
Girándose, grito de alegria antes de correr hacia adelante y poner sus manos alrededor del cuello de su demonio favorito
"¡Mi Mi Alastor! Normalmente no llegas tan tarde, ¿Cuál es la ocasión?", pregunto mientras llevaba a su mejor amiga a una mesa cercana, preparando rápidamente su té de rosas favorito. "¿Que fue eso querida? No puedo oír tus murmullos", pregunto, agarrando la bandeja de té y girándose hacia su amiga.
El ciervo Omega se sonrojo aún más, su pie pateó suavemente el suelo antes de  mirarla  tímidamente, "Rosie, me casó mañana".

La mujer lo miro en estado de shock, boquiabierta y quieta por unos momentos.
Luego, vacilante, colocó la bandeja de té sobre la mesa y agarro con fuerza las manos de Alastor.

"Alastor, cariño. ¿Estas siendo..... obligando?.
Los ojos de Alastor se abrieron como platos.
"No,no, cielos no, mi querida Rosie", se rió, "es muy consensuado, te lo aseguro. Ambos estamos ganando algo con esto y si soy honesto", Alastor se callo y se sonrojo.

Rosie, al sentir los chismes, se acercó al ciervo Omega que se movía nerviosamente en su asiento. Ella inclino la cabeza y su boca se abrió cuando percibió su  fuerte aroma a pachulí.
"¡Alastor!", jadeo, "Está es la primera vez que Oli que te excitas".  Alastor se rió,
"No puedo evitarlo, el me protegió", dijo efusivamente Alastor.
"¿Quién?", pregunto Rosie

Alastor se rió, sabiendo exactamente cuánto iba a disfrutar esto su amigo. "Me voy a casar con Lucifer Morningstar".

Rosie jadeo dramáticamente, colocando su mano sobre su pecho, "!Explícate Alastor!".
Alastor se rió ante el shock de su amigo. Empujándose hacia adelante y contándole animadamente sobre los sucesos anteriores.
Rosie, por supuesto, ya sabía del asalto, ya que había consolado a Alastor al respecto hace tantos años. Recordó esos días horribles, abrazando desesperadamente a Alastor mientras su cuerpo temblaba de dolor, consolandolo mientras sollozaba por lo que había perdido y tratando desesperadamente de ayudarlo a comprender que no estaba arruinado por la violación.

Que emocionada se sintió al saber cómo el rey había defendido a Alastor contra su atacante, como había protegido y consolado al pobre Omega. Aunque Rosie nunca había conocido personalmente al Alfa, no podía perderse los dulces suspiros que Alastor dejaba escapar mientras hablaba de él. Podía ver cuánto Alastor adoraba al Alfa, habiéndose  enamorado de su naturaleza protectora.

Cuando Alastor menciono que tendrían al menos un hijo juntos, Rosie pudo contener su grito de emoción. Sabía que apesar de la brutalidad del asalto, Alastor añoraba al niño que perdió. También sabía del cariño que  el Omega sentía por el joven Charlie  y lo decepcionado que estaba de tener que pretender ser su padre en lugar de su madre.
Rosie tampoco podía negar la emoción que sentía en convertirse en tía.

Una vez que Alastor termino su historia, la llamo y le dio una copia de los términos del matrimonio que ella leyó rápidamente. Al no encontrar algún problema con el documento, viendo como prácticamente garantizaba la protección y bienestar del Omega, volvió a colocar los documentos sobre la mesa y miro a Alastor, quien buscaba desesperadamente su rostro.

Rosie sonrió con aprobación, lo que hizo que Alastor suspira de alivio. Rosie tomo las manos de Alastor entre las suyas.
"¡Estoy tan emocionada por ti,  Alastor! Serás una maravillosa esposa y madre; ¡Te lo puedo garantizar!". Suspiro felizmente, tomo un sorbo de su té que ahora se estaba enfriando antes de preguntar: " Aunque me alegra que me hayas contestado sobre esto, todavía me preguntó porque parecías molesta, ¿Hay algo en el matrimonio que te preocupa?".