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Minho se encontraba de camino a su hogar, había visto a Jeongin con alguien más alto que él acompañándolo, entonces decidió no interrumpir y se fue solo de la universidad.

El director SeokJin no lo regaño ante la acusación de la profesora, por el contrario, solo le dijo que tuviera cuidado con sus horarios, sabía que Lee no era una alumno irresponsable, así que Kim le mentiría a la profesora que Minho había sido regañado y castigado.

En todo el camino, que por cierto caminaba lo más lento que pudieran sus piernas para llegar tarde, pensaba en aquel joven, es decir, a las justas soltaba feromonas y las excepciones eran solo cuando estaba en sus ruts¹.

Cuando llegó a su hogar, este andaba muy silencioso para ser verdad, fue al comedor y vio una pequeña nota de papel en la mesa dónde su madre le decía que todos (menos su padre) habían ido al funeral de un tio abuelo lejano que no tenía hijos.

Sabía que su madre había ido solo por la herencia que supuestamente el fallecido dejó, lo más seguro es que haría su drama de mujer depresiva por un familiar que apenas conocía.

Por otro lado, Minho se sentía feliz, tendría todo lo restante del día la casa sola para él.

Su madre no había dejado nada para la cena, solo unos billetes para que se comprara algo a domicilio. Minho tuvo un mejor idea que comer comida rápida.

Agarró sus llaves y fue al mini supermercado que se encontraba más cerca de su casa. Él nunca podía cocinar para su familia, sus padres en especial, tenían también la idea de que solo los omegas debían cocinar para los demás.

De pequeño, su madre siempre le escuchaba y le animaba con que sería el mejor chef del mundo aunque un pequeño Minho supiera solo cocinar omelettes. Esto también cambio al presentarse como alfa.

Estaba indeciso con lo que cocinaría pero al final eligió algo simple, no tenía mucha hambre, así que haría ramen pero no cualquier ramen, sino uno que le enseño Chaeyoung, que tenía un exquisito sabor.

La Omega le contó que a veces la dejaban sin comer a ella y a sus compañeras, entonces se las ingeniaban para comprar algo de ramen, verduras y condimentos, ya que eran muy económicos con las pocas monedas que guatdaban secretamente.

De ahí encontraron un punto exacto donde esta sopa relativamente muy normal, se convirtió en la mejor comida que habían probado, aunque no hayan tenido el lujo de probar otras nuevas comidas.

Minho compro un poco de cada ingrediente que necesitaría para poder prepararlo ya que no podía dejar rastro de esto y tampoco quería botar a la basura comida, haría lo necesario para él y su estómago.

Cuando obtuvo todo, fue hacia la caja registradora donde habían dos personas, una señora con su pequeña hija y un chico al parecer, más alto que él. Estaba con una capucha y un gorro, así que no podía ver su rostro.

La señora discutía con su pequeña hija, está quería un dulce pero su madre le regañaba con que ya había comido muchos en un solo día. Minho tenía sus brazos totalmente ocupados y se le estaban adormeciendo.

Luego de que la niña empezará a llorar, la señora pagó todo y le tocaba al chico delante suyo. Este le dió rápidamente al joven cajero una caja mediana y al parecer una caja de pañuelos, el chico escaneo los dos objetos.

-¿Cuánto es en total?- Preguntó el joven encapuchado, casi en un susurro. Los brazos de Minho ya sentían un poco de calambre.

"Debí haber agarrado el coche pequeño."

Minho mientras se arrepentía, el joven encapuchado ya había pagado y agarro los productos que compró rápidamente, volteó pero por irse rápido, chocó con Minho, haciendo caer sus propias cosas y las de Minho.

Minho soltó una maldición en voz baja y rápidamente recoge sus cosas, sin darse cuenta que también había agarrado las del contrario.

Puso todo en la caja algo cansado y vió algo inusual en la pequeña montaña de alimentos, esa caja que había comprado el contrario, era una prueba de embarazo.

Minho abrió los ojos más de lo normal, algo desconcertado pero se volteó para devolverle al dueño su pertenencia.

Los dos estaban a centímetros que los separaban, Minho se puso nervioso y retrocedió al ver que era el mismo joven con el cuál tuvo una pequeña conversación en la universidad.

Pero en diferencia a las anteriores horas, pudo percibir un aroma muy agradable, no sabría decir de que era, pero le gustaba.

El contrario le soltó un "gracias" y desapareció por la puerta de la tienda. Minho aún estaba atónito, pasaron los segundos y aún se movía, al menos no hasta que la persona que estaba en la caja registradora le exclamara el total de pago.

Minho asintió levemente y pagó todo. Sintió su estómago gruñir, todo esto le había dado hambre.

"Que día más raro fue el de hoy"

Ahora Minho se encontraba tomando el ramen que preparo con un pensamiento que no   dejaría dormir toda la noche.

¿Acaso aquel joven iba a ser padre?

Minho negó con la cabeza y agradeció no ser un irresponsable al tener hijos tan joven. Limpio todo y fue a su cama. Debajo de sus cobijas Minho revisaba una notificación que le había llegado de su Instagram, la app que nunca utilizaba, solo la había descargado luego de tanta insistencia de Jeongin para que lo arrobara.

Nueva solicitud de amistad: _doolsetnet

Minho frunció los dos ceños, nadie sabía de su cuenta, esta era privada y solo seguía a Jeongin, cuatro grupos musicales que le gustaba y dos personas más. Se descubrió las cobijas, subió todo el brillo de su celular y revisó nuevamente aquella notificación.

El alfa estaba muy... muy... ni sabía que sentía pero tenía algo de miedo, la foto de perfil era del joven que encontró dos veces el día de hoy.

Minho se asustó al pensamiento de que fuera un acosador, su vida era tan tranquila y que de repente pasara esto en ella...

-Ouch- Sin darse cuenta que estaba boca arriba con los brazos extendidos hacia el techo, soltó el celular al estar pensando muy profundamente.

Golpeó su rostro, principalmente su nariz. Se sobó con cuidado, ¿como es que una cosa así pesará tanto?

Luego de un par de minutos levantó su celular aun prendido con la página.

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-Uh?- Minho tardó unos segundos en darse cuenta de lo que sucedía.

Abrió los ojos como platos cuando le llegó un mensaje de aquel chico.

"¿Cuánto esperaré para que me sigas también?"

Minho apagó el celular rápidamente, se levantó a su armario y lo guardo en uno de los cajones, ocultandolo con muchas prendas.

Volvió a su cama y se hizo bolita.

Moría de pena, anhelaba que de la nada la universidad fuera incendiada por alguien para no tener que salir de su hogar.













Rut: Ciclo de apareamiento o más bien dicho celo.

(No me convence del todo el cap)

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⏰ Última actualización: Jul 08 ⏰

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𝐀𝐋𝐏𝐇𝐀𝐒 - 𝐇𝐊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora