Hyung, Estoy Enamorado (Libro 1)

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Jungkook ensayaba en solitario unos sensuales pasos de baile, de alguna de sus nuevas coreografías. El resto de los miembros ya hace rato se habían ido al departamento. Sólo estaba Seokjin, que se había quedado a "cuidar" al menor, porque se lo había solicitado.

Mientras ensayaba, miraba distraídamente su celular, pero sólo en apariencia, porque en realidad no podía apartar sus ojos de los movimientos sensuales que hacía el menor. Lo volvían loco. Deseaba poder acercarse y tocarlo. Fantaseaba con ponerse detrás de él y sentir cada uno de los movimientos que hacía con su cuerpo. Él lo rodearía con sus brazos y le quitaría lentamente la ropa para acariciar ese cuerpo que conocía perfectamente. Muchas veces se habían duchado juntos.

Conocía por tanto a la perfección el bien formado cuerpo del maknae y sólo pensar en eso lo excitaba. Decidió entonces volver a mirar su celular. Estaba viendo los "shipp" que ARMY le gustaba hacer. "Jikook" "Vkook" "Namkook", "Yoonkook", "Hopekook", pero nada de "Jinkook". Bueno algunos. Pero básicamente hablaban de su amor de hermanos y hasta algunos de su amor "madre e hijo". Cómo odiaba esto último. Él era un hombre y además su amor por Kookie, jamás había sido de una madre. Al principio tal vez fue amor de hermanos, pero eso prácticamente fue cosa de minutos. Porque desde que lo conoció se había enamorado de Jeon Jungkook.

Lo atrajo su inocencia y timidez. Sus bellos ojitos de ciervo asustado. Pero él había estado a su lado, para ayudarlo a salir de su encierro. Lo había cuidado y mimado con todo lo que tuvo a su alcance, pero en ese proceso se había enamorado. Así había vivido todos estos años, mirando de lejos a su hermoso bebé.

Claro, ellos tenían una relación especial, un vínculo distinto. Jungkook se aferraba a Seokjin cada vez que tenía terror de subir al escenario o cuando sentía que no lo había hecho bien. Hasta dormían juntos, cuando el maknae no lograba conciliar el sueño. Él jamás se negó a nada, aun cuando tenerlo tan cerca le provocaba un dolor inmenso.

Por eso le gustaba unas cuantas cuentas que los emparejaban. Observaba las fotos donde ARMY hacía comentarios sobre cómo se miraban o se tocaban. Pero él sonreía. Que equivocadas estaban.

Jungkook no lo miraba como enamorado, sólo era admiración y amor fraternal. Asco, asco era el amor fraternal.

—¿Hyung crees que lo hice bien? ¡Seokjin Hyung te estoy hablando!

—Oh, perdona Kookie no estaba poniendo atención —le mintió, había seguido cada uno de sus pasos, pero no podía decirle lo hermoso que se veía al bailar.

Jungkook hizo un puchero. Él quería la opinión de su Hyung favorito, pero al parecer estaba más interesado en su celular.

—Está bien Hyung. Parece que su celular es más importante que yo. Estoy listo, vámonos a casa. Voy a salir después y quiero ducharme.

—¿Vas a salir Kookie?, pero ya es muy tarde. ¿A dónde irás y con quién? —Seokjin odiaba que Jungkook saliera sin él. Sobre todo si era para juntarse con sus amigos de GOT7.

—Saldré con Bamban y Yugyeom. En realidad voy a su casa. El resto de chicos tienen libre y fueron a ver a sus familias.

—No me gusta que salgas tan tarde. ¿Serán sólo ustedes?

Jungkook se puso nervioso. No quería entrar en detalles con Seokjin. Hoy sería una noche especial para él, pero no estaba listo todavía para contarle.

—C-claro que sí. Sólo los tres. Pero no te preocupes uno de nuestros manager irá conmigo. Luego volveré a casa. No me quedaré con ellos.

—¿Por qué creo que me estás mintiendo Kookie?, dime la verdad. ¿Me estás ocultando algo?