𝐌𝐞𝐠𝐮𝐦𝐢 𝐅𝐮𝐬𝐡𝐢𝐠𝐮𝐫𝐨

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𝘈 𝘤𝘰𝘯𝘵𝘪𝘯𝘶𝘢𝘤𝘪ó𝘯:

Un día nuevo, un nuevo comienzo la emoción de la hermosa muchacha inundaba todo a su alrededor

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Un día nuevo, un nuevo comienzo la emoción de la hermosa muchacha inundaba todo a su alrededor.
Era el día en el que saldría de aquellla habitación que había estado tanto tiempo sin salir.

Se encontraba peinándose quería verse presentable en su examen el cual toda la noche estuvo estudiando para poder pasarlo, tal vez no le habían explicado bien cómo sería el dichoso "examen".

La puerta de la habitación fue tocada repentinas veces sonaban impaciente los golpes detrás de esa puerta de madera

Puede pasar -alzó la voz para que la lograran escuchar, solo tenía dos opciones de quién pudiera ser-

Cómo estás __, lista para ir a la escuela?

Claro que si Shoko estoy tan emocionada.
-decía en tono muy animoso-

El corazón de la mayor se estrujaba con solo verla pero esta vez, esta vez no fue por solo esa razón, tenía miedo ¿de que? Que su joven amor se fuera de su lado, pero ella que podía hacer, no podría mantenerla es este lugar para siempre por más que quisiera, ya no podía.
En todo ese sentimiento de tristeza siempre se asoma otro, el famoso sentimiento de celos, sus pensamientos terminan nublados de ellos que atacan a su corazón de forma repentina, el solo pensar que en esa escuela estará con personas de su edad y termine haciendo amigos o peor a un que termine encontrando el amor, la consume.

____, prométeme algo -habló rápidamente mirándola con una mirada perdida cosa que alarmó a su acompañante- no me olvidarás, recordadas todo lo que eh hecho por ti.

Claro que si Shoko-san eres alguien que me ayudó mucho jamás me olvidaría de ti
-le sonrió, ya no quería que se sintiera así de alguna forma ella sabía que su querida amiga estaba triste por su partida y lo comprendía, ella igual estaba triste por que ya no la vería tanto- nos veremos seguido eso te lo prometo.

Recuerda que eres mi amiga, mantenme en tu corazón.  No dejaré que nadie me aparte de tu lado.

Pobre niña se sintió tan conmovida al escuchar esas palabras que fue a darle un abrazo, no logro percibir las verdaderas declaración de la castaña que estaba llena de celos en solo pensar que alguien más tendría tu cariño que no le importaría "apartar" a quien sea de su lado.

Es momento de irse no quisieras llegar tarde tu primer día.

Claro que no - dijo aportándose de los brazos que la rodeaban- andando

Ambas mujeres se dirigían a la salida de esas cuatro paredes de cual la de menor estatura se encontraba ansiosa de cruzar esa puerta que sin querer la hacían sentir una prisionera, al cruzarla sintió la libertad pura, se había sentido tan aislada todo este tiempo quería ir a explorar el mundo del cual tenía pequeños vistajes de su memoria confusa.

𝐈𝐧𝐞𝐫𝐜𝐢𝐚 -jjk Donde viven las historias. Descúbrelo ahora