III

477 67 73
                                    

".......".

"......".

"Ah, princesa, ya es de día".

"...........ñum ñum ñum..", murmuraria.

"¿Que clase de sonido es ese?, jajaja".

Un nuevo día, un nuevo comienzo.

Solo que esta vez comenzaré mi día al lado de una adorable peque de mejillas regordetas.

Normalmente la princesita suele quedarse en el mesón siendo cuidada por Loraine. Pero ahora que estoy de vacaciones, ella se toma el lujo de quedarse a dormir en mi casa.

Ella se ha vuelto la dueña y ama de mi sala, nunca pensé tener un juego completo de béisbol en uno de mis estantes, pero no me molesta, además de que tampoco paso mucho tiempo en mi hogar, por lo que técnicamente mi casa también es suya.

"Lavate bien los dientes", le dije.

"Mnnn...", murmuraria somnolienta

Debo admitir que es adorable verla de esa manera, con sus ojitos cerrados y su pelo despeinado. Me recuerda mucho a los cachorros que kanna suele cuidar. Y su pijama de foca es un golpe directo a la diabetes.

Ahora entiendo porque Loraine se esmera tanto en cuidarla.

En fin, mientras ella se aseaba decidí hacer el desayuno. No me considero el mejor cheff y estoy muy lejos de la habilidad de cocina de Loraine, pero al menos nunca escuché a la princesita quejarse de mi comida.

"Aquí tienes", diría entregando un plato con huevos y arroz, mucho arroz.

"Gracias por la comida".

Y ella empezó a comer alegremente, llenando sus cachetes y sonriendo de oreja a oreja.  Supongo que mi cocina no es tan mala después de todo.

Y para contrarrestar aquella aura adorable, dedici tomar un café acompañado de una tostada casi quemada.

Un comienzo tranquilo y pacífico como otros.

"Cabashero", diría ella mientras comía.

"¿Que sucede?, y no hables con comida en tu boca".

Ella trago y me miró con una sonrisa. "¿Crees que la señorita Charlotte ya se marcho?".

Bebi mi café. "Fuu... Supongo que si, ella debe haberse marchado hace horas".

Mire el reloj que estaba colgado en la pared, eran las once en punto. Vaya, ahora parece mala idea habernos trasnochado toda la noche jugando videojuegos.

"No le digas a Loraine que nos quedamos despiertos hasta tarde".

"Ehhh quien sabe, tal vez se lo diga jiji", se rió de manera traviesa, mientras bebía su taza de leche.

"Oye", me queje.

Ella solo rió mientras se balanceaba de un lado a otro.

"¿Vas a chantajear a tu caballero?", pregunte con una sonrisa.

"No es chantaje, jujuju.... Es solo un intercambio", dijo orgullosamente.

"Si, definitivamente ya no dejare que juegues con Dolf y Amy".

Aunque parezca raro, esos dos no son tan malos cuidando a la princesa, dejando a un lado su lado estafador, Dolf puede ser alguien muy responsable. Y a Amy no se queda atrás, varias veces la vi pasear con la princesita y si no fuera porque las conozco, ellas dos parecerían hermanas.

Además que estoy agradecido con ellos por ser amigos de la princesa, a ella realmente que le cuesta hacerse con amigos de su edad. Varias veces tuve que aguantarme las ganas de vestirme de morado y querer comerte un crimen en contra de un niño.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 23 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Vampiro Y Caballero (Guardian Tales)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora