Explosión de Amor (KiriBaku)

C6. Empezar de cero

Cuando Bakugo despertó esa mañana pidió al universo que le diera otra cosa en la cual pensar que no fuera en eso. Sin embargo, no sabía si era peor esa situación o esta; porque a él, a Bakugo Katsuki, el lindo, guapo, increíble, popular, adinerado, y perfecto Bakugo Katsuki no le podía estar moviendo el piso un vaquerito grosero, corriente, ordinario, pobre, gato, bien hecho, estúpido y naco como Kirishima Eijiro ¿verdad?

Era divertido molestarlo, ¿pero gustarle? Ja, que buen chiste... porque era chiste, ¿no es cierto?

— Encontré unas frazadas, toma- Kirishima le ofreció un trapo mugroso que olía a muerto.

— Paso

Bakugo se hizo bolita en su lugar, antes muerto que con algo tan asqueroso.

— Ni un burro es tan terco.

— ¡¿COMÓ ME..?!

El pelirrojo se arrodilló frente a él, rodeándolo con la frazada. Katsuki quedó inmóvil. Eijiro no dijo más, solo se dedicó a abrigarlo bien y se puso de pie comentando que buscaría madera seca dentro del granero.

Miró a su lado, donde el vaquerito dejó la otra frazada, expectante a que se sentara con él.

La tela sí lo abrigó, sintió el calor de su cuerpo regularse gracias a ella... gracias a él. Apestaba a animal, moho y guardado, pero supuso que no podía morirse de frío; eso sería muy de gatos.

No sintió el tiempo pasar hasta que el pelirrojo regresó con pedazos de cerca y prendió fuego con ella. Se sentó a su lado, a una distancia prudente y no lo molesto.

— ¿Qué tienes? - rompió el silencio.

Bakugo respondió de la única manera que sabía hacer: lo miró de mala manera y puso los ojos en blanco.

— Como si te importara.

Silencio absoluto.

—Sí me importa, aunque no lo creas. - la tormenta estuvo a punto de ahogar sus palabras. Pero, aun así, se escuchó sincero.

— Ya claro.

— Estoy tratando de empezar de cero. - aclaró. Estaba jugando con la paja y el fuego, lo que le irritaba. No lo miraba a los ojos- si "no paso nada entre nosotros" lo correcto es iniciar desde cero.

Su irritación por la falta de contacto visual se convirtió en agradecimiento cuando sintió la cara caliente. De enojo, seguramente.

— ¡¿Eso qué?! - se puso a la defensiva- No hay un "nosotros".

— ¡Exacto! empecemos de cero. - propuso. Se giró con una sonrisa demasiado amable y extendió la mano en su dirección. - Hola, soy Kirishima Eijiro.

— No voy a darte la mano.

Kirishima quiso golpear su cabeza contra el suelo. No había bajado la mano, en su lugar, se arrastró para estar más cerca, lo cual motivó a su seño fruncirse más.

Eso de "empezar de cero" siempre se le ha hecho una mierda, solo debían fingir que lo que pasó no pasó y ya. Porque fingir que se acaban de conocer no haría que su madre le permitiera largarse de ese horrible rancho.

— Tu propuesta es ridícula- expresó- empezar de cero sería revivir tu grosería de aventar mis maletas y hacer que me castigaran.

— ¡No es por eso, es por nosotros! - el pelirrojo se desesperó.

— ¡QUE NO HAY UN NOSOTROS! - gritó irritado de la misma palabra.

— ¡BIEEEN!- le contestó Kirishima del mismo modo. Bakugo abrió la boca, disgustado de que le alzara la voz. El pelirrojo lo notó por lo que tomó una bocada de aire antes de volver a hablar- pero vamos a seguir conviviendo y sé que muy, muuuuuy en el fondo de ti, pero enserio, muy en el fondo....