THE ORIGINALS (HAYLIJAH) (PAUSADA)

-1

𝘏𝘢𝘺𝘭𝘦𝘺 𝘔𝘢𝘳𝘴𝘩𝘢𝘭𝘭

「 »Va Va Voom- Nicki Minaj« 0:50 ─〇───── 2:30 ⇄ ◃◃ ⅠⅠ ▹▹ ↻」

Hacía demasiado que no volvía al pantano, sobretodo para ver como estaba Jackson y la manada.

Me había centrado sobretodo en Hope y en mantener las garras mezquinas de Klaus lejos de cualquier cosa que pudiera perjudicar a nuestra hija. Hija que por ser del hermano del que fue mi pareja no iba a odiar ni repudiar, la amaba con locura y con todo mi corazón pero... 

Sé muy bien lo mal que estuvo lo que le hice a Elijah y que por mi culpa se fue de Nueva Orleans.

¿A dónde?

Lo desconocemos todos, tanto sus hermanos como yo. Nadie sabía nada de él ni siquiera Klaus aunque, para sernos sinceros, después de la pelea tan fuerte que tuvieron cuando Klaus le contó a Elijah lo de mi embarazo... supongo que es normal que no se hablen.

Me bajé del coche cerrando la puerta con seguro, quedándome justo a la vera de la puerta del conductor para apreciar el pantano. Estaba precioso, tal y como lo dejé. Pero... no había nadie.

Era muy raro no ver aunque fueran a dos personas del clan por allí cerca, pero es que no había nadie. Estaba desierto y eso hizo que me preocupara.

—¿Hola?— Elevé mi tono para que se me escuchara bien—.

Nada.

—¿HOLAA?— El eco hizo que mi voz resonara. Vi movimiento en la casa del lago y sin dudarlo me acerqué para ver que era lo que pasaba—.

Toqué la puerta con brío y para mi relajación, el que abrió fue Jackson.

—¿Hayley? ¡Hacía siglos que no te veía!— Jackson parecía feliz de verme y eso me sacó una sonrisa—.

—Hola a ti también Jackson, exacto, la única e inigualable. Hayley Marshall.

Jackson me dio un abrazo reconfortante, la verdad es que necesitaba uno.

—¿Cómo tú por aquí? Ven, pasa.— Se hizo a un lado para que pudiera pasar y en cuanto lo hice cerró la puerta. Miré a la pequeña cocina que había junto a la puerta y vi una olla al fuego, estaba cocinando—.

—Necesitaba desconectar de tanto vampiro y rollo original, necesita reconectar con los míos.— Sonreí con sinceridad tras terminar de hablar y me acerqué a los fogones—. ¿Qué cocinabas?

—Te entiendo, no se está mejor que en casa.— Se colocó a mi lado volviendo a coger la cuchara de madera con la que empezó a remover el caldo—. Sopa de pato, la favorita de mi abuela, más tarde pensaba llevársela pero me vienes al pelo, justo tengo que dejarla reposar.

—Me alegro de haber venido en un buen momento.

—Siempre vienes en buen momento, Hayley. Nunca molestarás.

No oculté la sonrisa que su comentario me había sacado. Me senté en el sofá improvisado del salón también improvisado.

—¿Qué tal está la manada? No he visto a nadie al llegar.

—Oh, sí, te recuerdo que ahora que eres híbrido no te afecta la maldición pero a nosotros sí. Muchos se alejan tanto del pantano que tardan días en volver y para cuando lo hacen ya son lobos de nuevo.

Me debería de haber mordido la lengua, me había olvidado de aquello y odiaba tener privilegios por encima de ellos.

—Te prometo que estoy buscando como solucionar esto con las brujas.— Esta vez había dejado mi tono alegre y familiar para hablar con seriedad. Era un tema que no me parecía del cual bromear—.

—Todos lo sabemos, no te preocupes, pensamos que eres una líder genial. 

Eso me llenó de orgullo.

—Y... ¿has hablado con tus brujas?— Le pregunté a Jackson. Eran brujas ajenas a la maldición, brujas que no tenían nada que ver con Nueva Orleans, eran de St Bernard y eran un encanto que se habían ofrecido a ayudarme con mi segunda investigación—.

Se trataba de encontrar a Elijah.

Habían pasado 10 meses desde que Elijah tuvo aquella horrible pelea con Klaus y se marchó sin decir nada ni a donde iba. Me sentía muy culpable y necesitaba hablar las cosas con él.

Está fatal, mal, horrible, horroroso, espantoso... me faltan adjetivos para describir lo que hice pero sí he de decir que lo que le hice a Elijah fue criminal.

Nunca he estado tan arrepentida de algo en mi vida.

—Las brujas dicen que contactarán contigo para hacerlo, no tienen pega alguna solo que necesitan algo a cambio.— Jackson caminó para sentarse justo a mi lado, apoyando ambas manos en cada rodilla—.

—¿Qué es lo que quieren?

—Quieren revivir a un tal Kai Parker.

—¿Quién?

Jackson se alzó de hombros.

—Al parecer es un brujo que murió y quieren devolverle a la vida, la cosa es que los Mikaelson son los únicos que cuentan con ese hechizo al haber sido Esther la creadora.

—Y quieres que lo robe.— Terminé por él la frase—.

—Dudo que Klaus te lo vaya a dejar así que sí.

Ni idea de quien era Kai Parker pero me daba absolutamente igual el porque aquellas brujas lo querían de vuelta. No me condicionaba en nada por lo que no me iba a preocupar.

No por ahora.

Mi prioridad en estos momentos es encontrar a Elijah.

Me daba igual cual fuese el precio que pusieran al ser él un original.