♣⃠ Peligrosas Tentaciones♣⃠ [libro #2] [En edición] ✓

🍁¿Crees que soy real?🍁

"Las emociones inexpresadas nunca mueren. Son enterradas vivas y salen más tarde, pero de peores formas."

Sigmung Freud

Aún en shock, levanté la vista poco a poco, encontrándome con el chico de ojos oscuros y rasgos asiáticos. Era él pero... ¿Que hacía allí?
No, la verdad no me importa, necesitaba ayuda y él me la había ofrecido, no tengo porqué preocuparme por cosas tan insignificantes como esas, al menos no por ahora.
Al escuchar su amenaza, el joven desconocido se dió media vuelta aún estando en el piso, y se arrastró fuera de la pista de baile.
Presencié como se marchaba con la nariz toda rota y la cara llena de sangre, luego me volteé para encarar a la persona que me había salvado pero ya no estaba allí, o mejor dicho, trataba de irse, pero yo le seguí hasta la barra en donde despachaban las bebidas del minibar.

— ¡Hey! —le llamé, pero este no parecía hacerme caso.

Inmediatamente, el mismo se sentó en un lugar vacío y pidió un whisky frío, ignorando mi presencia por completo.

— ¡Hey tú! —me acerqué a él y le jalé del brazo para que se diera cuenta de que le llamaba.

— ¡Lárgate Kasia! —ordenó sin prestarme atención, dándole un trago a su bebida.

— ¿Quién eres? ¿Acaso me estás siguiendo?

Añadí, ignorando completamente sus palabras, tal y como él lo hacía conmigo.

— Eso no es de tu incumbencia...

— ¿Qué? ¿Cómo que no? ¡Claro que lo es! Desapareciste de mi universidad amenazándome con que no me acercara ti, ¿Pero ahora resulta que me andas siguiendo?

Señalé algo molesta, estaba cansada de ser ignorada por un idiota, que por muy bueno que hubiese sido al salvarme, no le quitaba el hecho de lo poco educado que se mostraba.

— ¡Escucha! —se volteó hacia mí, ya algo cansado y molesto de que le insistiera tanto- Es mejor que te largues de mi lado antes de que...

— ¡Kasia!

La voz de Celine interrumpió nuestra charla, dejando con las palabras en la boca al chico de rasgos asiáticos.
Al escuchar mi nombre, me volteé hacia mi amiga y pude ver cómo ella y su pareja se acercaban rápidamente.

— ¿Piraña en donde andabas? Te estuvimos buscado todo el maldito rato.

Agregó Ronan preocupado, colocándose a mí lado junto a Celine.

— Estoy bien, de hecho estaba... —me giré para señalar al chico que me acompañaba pero al hacerlo me percaté de que ya no estaba junto a mí, se había ido- estaba...

— ¿Estabas que Kasia? —replicó Celine confundida.

— Nada, yo solo... Quería ordenar algo de beber...

— Entiendo, pero al menos tenías que habernos avisado, ¿No crees? —resopló Rony, aún con la respiración agitada.

No puede evitar soltar un largo y pesado suspiro ante sus palabras, ambos se parecían a mi padre reprochándome cosas como si aún fuera una niña pequeña.

— Lo que digas Rony, yo solo... Quiero regresar a casa...

Añadí antes de que continuaran hablando pues ya no quería seguir escuchándolos, y la verdad estaba algo cansada.
Ambos se miraron a los ojos al escucharme, y luego asintieron a la vez.

— Está bien, te llevaré...

— ¡No!

Alcé la voz negando su propuesta, este se asustó un poco pues había hablado demasiado fuerte, por lo que en su rostro se formó una expresión de confusión.