𝒫𝓇𝒾𝓂𝑒𝓇𝑜 𝑒𝓃 𝓂á𝓈 𝒹𝑒 𝟣 𝓁𝓊𝑔𝒶𝓇

𝑷𝒓𝒊𝒎𝒆𝒓𝒐 𝒆𝒏 𝒎á𝒔 𝒅𝒆 1 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓

Las lecciones solo se pueden aprender si experimentas los problemas que conllevan. 

Rin e Isagi se habían enterado de eso muy temprano en su relación después de que Rin bebiera alcohol en una fiesta hecha para reunir a los antiguos miembros de Blue Lock. 

A Isagi todavía le gusta bromear con Rin sobre lo que sucedió esa noche, a pesar de que no puede recordar mucho de eso.

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Rin odiaba la idea de ir a una fiesta más que nada en el mundo. Era alguien a quien le gustaba más estar solo que con otro. Isagi había trabajado mucho en eso, era capaz de estar rodeado de gente durante más tiempo, aunque eso no significaba que su tolerancia fuera alta.

Isagi le arregló la corbata, sonriendo cariñosamente. 

"Rin, tienes 22 años y todavía no puedes atarte tu propia corbata". 

Isagi tiene un sonido burlón en su voz. Rin pone los ojos en blanco, sin comentar al respecto. 

"Vamos a llegar tarde si juegas tanto con las pequeñas cosas". 

Isagi agarra suavemente su muñeca para arreglar su brazalete. 

"Sí, sí, hay paparazzi por todas partes. Si te ves en mal estado, será malo para tu imagen". 

Isagi retrocede, mirando a Rin hacia abajo. 

"Sí, te ves bien". 

Rin frunce el ceño, "¿Solo un poco?" 

Isagi se burla juguetonamente y se aleja hacia la puerta. "Como dijiste, llegamos tarde". Rin se levantó y desempolvó el polvo inexistente. Salieron de la casa y se dirigieron a su coche particular.

Mientras el conductor los llevaba al lugar, Isagi tarareó pensativo. 

"Ya sabes, Rin Rin... Nunca te había visto beber antes". 

Rin miró a Isagi, simplemente parpadeó hacia Isagi. "¿Alguna vez has bebido? ¿Eres un peso ligero?" 

Rin puso los ojos en blanco, "Qué preguntas tibias". 

Isagi miró a Rin, esperando una respuesta. 

"No he bebido nada antes. Sae me advirtió que no lo hiciera y presté atención a su advertencia".

 Era típico de Rin seguir cualquier cosa que dijera Sae, Isagi frunció el ceño. 

"Bueno, tu hermano es extremadamente aburrido". 

La mirada que recibió Isagi a ese comentario podría matar, sin embargo, Isagi solo se rió, estaba acostumbrado a esto.

El coche llegó al lugar, los chicos fueron escoltados fuera del coche y a través de la multitud de personas que esperaban. Rin sintió como si estuviera siendo golpeado por la cantidad de flashes fotográficos que bloqueaban su visión. Una vez que entraron en el edificio, el ajetreado ambiente se llenó de calma. Se podía oír hablar en voz baja desde la distancia. 

"Guau. A la mierda Reo y su dinero".

Isagi se rió del ridículo lugar, desprendía una actitud pretenciosa. 

"Sí, ese tipo no sabe cómo bajarle el tono". 

Rin murmuró y caminó lentamente hacia la puerta en la que podía escuchar a todos residir. Isagi lo siguió, yendo frente a Rin para abrir la puerta.

El lugar era deslumbrante, luces brillantes, hermosas ventanas, flores que llenaban la habitación de un agradable aroma.

 "Sí. A la mierda de verdad con ese bastardo de Reo".