Otro Día Más (OneShot Bull x Colt/LeatherStarr)

Otro día más

La chapa se sacudía levemente mientras la llave estaba siendo insertada en la misma, la puerta se abrió lentamente, emitiendo un chirrido molesto en el apartamento.

Colt entró, exhausto como siempre, otro día de eventos y crímenes organizados, otro día que lo dejaba con una nula energía social, drenado y seco hasta el punto de querer rendirse. Se agarraba su brazo, el cual era una prótesis llena de un líquido especial el cual se regaba gota por gota en el piso.

"Mierda, no de nuevo, es la quinta vez esta semana"

Dijo cerrando la puerta de golpe para ir a un cuarto; al llegar, se sentó en una silla y se arrancó el brazo mecánico con el líquido brillante aún sobresaliendo de este para luego colocarlo en una máquina que lo arreglaría. Ahora, solo con su brazo izquierdo en servicio, tenía que defenderse de las tareas del hogar solo.

Su apartamento era grande y vacío, ahí solo vivía el y ocasionalmente sus amigos se quedaban a visitarlo, ayudándolo en la cocina y la limpieza, pero hoy el lugar estaba oscuro y absolutamente desolado, ni una luz encendida, solo el contra el mundo.

Se levantó, cansado y con la cabeza agachada, queriendo solo quedarse acostado en su cama y llorar hasta el día siguiente, no se sentía bien, una máscara de narcisismo y arrogancia no le servía para nada, ocultar como se sentía no le servía para nada, nada le servía para nada y por eso quería llorar, hasta que se duerma, hasta que amanezca, hasta el día siguiente, hasta que sus ojos se sequen, hasta que su corazón se detuviera.

Se fue a su baño para quitarse el maquillaje que tenía, que ocultaba todo lo que no lo hacía perfecto; unas pequeñas arrugas, unos lunares y sus ojeras que aunque no fueran tan grandes, el decía que lo hacían ver como un mapache

Después fue a la cocina y encendió la máquina de café donde puso una cápsula  de "Dolce gusto: americano" en su máquina de café y una taza debajo, al encenderla hizo un sonido, ese mismo sonido hacía eco en todo el lugar al ser el único ruido que se produjo.

Colt se cogía la cabeza, su pelo rojo enredándose entre sus dedos mientras intentaba quitarse el cansancio. Al rato, su taza estaba lista, un café humeante y de buen aspecto, pero al igual como el, ese dulce aroma tenía un sabor amargo, justo lo que le favorecía en ese momento.

Se recargó en el mesón de la cocina, dándole sorbos a su café tranquilamente, pero un sonido interrumpió el ambiente: un golpe en su puerta principal.

Se acercó lentamente a la puerta y miró por el ojo, para luego abrirla, preocupado y con muchas preguntas en la cabeza.

Bull entró, con pasos pesados y cerró la puerta detrás de el. Colt se acercó y tiernamente con su mano tomó su cara, examinandola bien

"Bull, cariño, que te pasó? Que- que fue lo que te pasó? Pareciera que un camión te arrolló, alguien te golpeó? Alguien te empujó? Que-"

"Supervivencia"

Dijo simplemente, su voz fría pero temblorosa, tenía ganas de romperse, de llorar, pero aún quería mantener su imagen de hombre rudo y pocos amigos

Colt lo sabía, el lo sabía, ambos lo sabían. El pelirrojo agarró su mano y lo llevó al sofá en dónde se sentaron, para que luego Bull, sin ningún aviso, se acostara y pusiera su cara en el regazo de su compañero para luego echarse a llorar, no era ruidoso, más bien su cuerpo temblaba de arriba a abajo, sus lágrimas manchando el pantalón de mezclilla de su amigo.

"Ya, todo está bien, tu estás bien y eso es lo que cuenta, solo fue un día...otro día más para agregar en la lista, es todo, tu déjate llevar que estaré junto a tí durante todo el trayecto, incluso cuando no me veas"