Donde James Potter y Mar Prince deben decidir entre la amistad o el amor
O
Donde la pareja debe fingir odiarse para no lastimar a sus amigos
²¹/⁰⁹/²³ a ⁰⁹/⁰⁷/²⁴
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𝐄𝐏𝐈𝐋𝐎𝐆𝐎 LA CARTA
1982
Después de tantas pérdidas la tranquilidad reinaba en la vida de Mar y James
El azabache cumplió lo prometido, compró un anillo aún más hermoso y le propuso por fin matrimonio a Mar.
La castaña había cambiado bastante en el transcurso del año, adoraba a su padre y la memoria de su madre, pero el apellido Prince no le traía buenos recuerdos, por lo cual después de hablar con su padre decidió que hasta que se casara sería apodada Maraya Taylor
....
Una campana sonó dando anunciar que alguien había entrado a la tienda
- Buenos días, vengo a Recoger el vestido de Maraya Taylor -
- ¿El de la señora Potter? -
- Si -
- ¿Usted es la señora Potter? -
- No, que asco - contesto - yo solo vengo a recoger el vestido -
- ¿Cual es su nombre? -
- Soy Marlene Mckinnon -
La joven del mostrador lo apunto y le entrego el vestido a la rubia, quien debido a su emoción casi choca el carro que James le presto para recoger el vestido
- ¡Mar! Ya llegue - Marlene subió rápidamente las escaleras y entró a la habitación donde Mar se arreglaba - Por Merlin mujer, deja los nervios, es más probable que tu te escapes a que James lo haga... - no recibió respuesta - ¿Quieres... -
- No marlene, no es eso - contesto Mar rápidamente
- ¿Entonces? - la rubia colgó el vestido y tomó asiento a su lado
- ¿Y si el vestido no me queda? -
- Yo te veo igual de delgada que siempre - contesto- ¿Porqué no te quedaría? - Mar solo dio una sonrisa inocente y Marlene solto un grito - ¿¡Estas embarazada!? - ella asintió- ¡Por fin seré madrina! -
- Baja la voz, nadie más lo sabe y James se esta arreglando en el piso de abajo -
- Ay, si, si, como sea... ¿Cuantos meses tienes? -
- Apenas tengo tres meses -
- Es poco tiempo, claro que te quedará el vestido y si no, aplastamos al niño - Mar le dio una mala mirada - Bien, usamos algo de magia -
Por fortuna de ambas el vestido le quedó perfecto a la castaña
Marlene se encargo de ayudarla con su peinado
- y ahora - Marlene la miro por el espejo - ¿Porque sigues tan sería? -
- Nada es solo... - detuvo su hablar - debe ser muy pesado para ti ayudarme con todo esto, digo, solo somos tu y yo, en cambio James tiene a Remus, Peter y a Sirius -
