Placeres (radioapple)

TRATO

Los gritos de las personas resonaban por los muros, por la ventana solo se podían ver los maltratos de aquellos uniformados que estaban en el campo y las lágrimas que corrían por los jóvenes rostros de aquellos que fueron condenados, los ojos de lucifer sabían que le esperaría y al sentirse tan impotente sus ojos por fin derramaron un par de lagrimas 

-No, morirás y tampoco trabajaras como ellos-

-Entonces, ¿cuál será mi labor? -

El uniformado alado solo se limitó a mirar por la ventana, y guardar silencio por el resto del camino, las manos del rubio no pararon de jugar hasta que a lo lejos de campo vio la casa en donde parecía se hospedaba Alastor , esa casa blanca llena de luces y que se daba a notar por el decorado rustico y que al llegar a ella fueron recibidos por una mucama y un soldado de bajo rango.

Al estar en la entrada principal las cosas del Sr Alastor fueron recogidas por la mucama de cabello pelirrojo mientras el soldado que estaba alado de ella se acercaba a él. 

-Husk, por favor instala a mi invitado y luego llévalo a la sala para darle sus funciones -

-Entendido -

Tras dar aquella orden se dirigió adentro de la casa no sin dedicarme una sonrisa, después de aquello seguí por la casa al soldado que observé durante el recorrido de aquella casa, su cabello ya teñido por algunas canas y sus ojos con ojeras por falta de sueño el uniforme que portaba y las armas que traía con sigo, sin mencionar el horrible olor a alcohol y cigarro.

al llegar a una habitación me indico que entrase.

-El jefe te esperara abajo, apúrate y baja-

El hombre cerró la puerta y fue entonces cuando por fin pude respirar con tranquilidad, parecía que el Sr Alastor no sería un mal tipo después de todo qué clase de Nazi traería a su casa a un sucio y horrible judío ; no pude evitar soltar una risita.

al voltear a ver la habitación me di cuenta de la clase de lugar que era, si no le doliera tanto el estómago juraría que esto era un maldito sueño, la cama parecía de esas las cuales estaban hechas de plumas por lo suave y esponjosa que se veía y las sábanas eran tan blancas que se notaria desde el espacio si alguien las llegase a ensuciar, el color de la habitación eran de un rojo menos chillón que el del traje del Sr Alastor y las luces eran tenues permitiendo una ambientación hermosa.

los cuadros que adornaban eran de hermosas pinturas y el tocador tenía todo lo que una mujer pudiera utilizar para arreglarse y alado en la silla del mismo un traje de color blanco con hermosas costuras rojas con dorado, adornados con un chaleco de color salmón y unas franjas de color blanco que enzima tenía una nota.

"Póntelo y baja"

Y entonces lo recordé, esto no era una excursión era trabajo o eso creía, me quité las prendas que tenía puestas y me puse el traje que generosamente se me proporciono para después bajar por el largo pasillo lleno de fotografías de lo que parecía ser la familia de mi anfitrión.

Finalmente terminé en la sala y fue entonces cuando lo vi, en un sillón grande del color que tanto parece gustarle con bordes de color negro sentado mirándome con esos ojos profundos y obscuros que quedaban a juego con esa sonrisa que desde que lo vi lo caracteriza.

-Siéntate-

Ordeno, y de inmediato tome asiento en el lugar en el sillón que tenía a mi lado 

-De acuerdo, en este momento eres mi... "secretaria" vas a tomar las funciones de la anterior y tendrás los mismos privilegios que en su momento tuvo o bueno casi todos -