JUEGOS DEL MAS ALLÁ (Rivari)

IV

Estábamos jugando cuando de repente Vero me habla.

Vero: Sam necesito ir al baño, ahora vuelvo.

Yo asenti para que el pueda ir al baño.

Después de unos minutos más tarde se escucha un ruido proveniente del
pasillo donde queda el baño.

Voy corriendo al baño para revisar si Vero estaba bien.

Pero me doy cuenta que esta cerrada la puerta y abajo hay una hoja.

La leo y dice:

"No creas que tu querida Novia va a estar bien"

"Querida Novia" pensaba una y otra vez al leer eso.

Toco la puerta del baño pero al tocar se abre... No esta abierta digo en mis pensamientos. Con miedo abro totalmente la puerta y no veo a Vero en el baño.

¡VERO! - Grito con desespero.

Busco en mi cuarto pero no hay nadie, vuelvo a la sala pero tampoco, reviso todas las salas pero me doy cuenta que la única que me falta es el sótano. Agarro una lampara y de inmediato bajo por las escaleras, enciendo la lampara ya que no hay tanta luz... Cuando llego al final de las escaleras paso toda la luz por todo el cuarto hasta que veo a Vero... Esta tirada en el suelo, con los brazos amarrados y en la boca esta con una cinta.

Voy corriendo y me agacho para tratar de ayudarla, cuando desenredo sus brazos observo que estan llenos de raspadas como unos arañazos, y tiene sangre en algunas partes de sus manos. Quito la cinta de su boca y ella me dice:

Vero: S-sam ten c-cuidado - Termina de decir esas palabras y como
puede apunta hacia las escaleras.

Volteo y la veo.

Veo a esa mujer que esta en las escaleras dando pasos hacia mi.

¡ALEJATE DE MI! - Le grito sosteniendo el cuerpo desmayado de Vero.

No te haré daño - Me dice la fantasma - Solo quiero jugar contigo - Dice la fantasma a mi oído.

Yo me muevo rápidamente para mirarla pero no encuentro a nadie, volteo hacia las escaleras y la vuelvo a ver.

¿¡QUE QUIERES DE MI!? - Le grito casi llorando.

"Te quiero a ti"

Al decir esas palabras la lampara que tenia en el suelo que estaba
encendida se apaga rápidamente.

Me quedo a oscuras y trato de encender la lampara pero no enciende, hasta que después de unos segundos se vuelve a encender. Logro ver que solo estamos mi hermana y yo.

Así que trato de ser rápida y cargo a mi hermana hasta que llego a mi
cuarto y la dejo acostada en mi cama, agarro un botiquín y le curo todas sus heridas.

Me quedo en la cama cuidando de ella hasta que por fin despierta.

Vero: ¿Samantha? - Me pregunta dudoso.

Samantha: Aquí estoy hermana.

Vero: ¿Qué paso?

Samantha: Tuviste una caída en el sótano - Le digo una mentira.

Vero: no me acuerdo de nada.

Samantha: ¿De nada?

Vero: Nada.

Suspiro con un poco de frustración.

Samantha: ¿Te duelen? - Apuntó a sus heridas.

Vero: Ya casi no me duelen, solo si me tocan.

Samantha: Que bueno ¿Quieres ir a comer? Llego la comida hace un rato.

Vero: Que bueno, me estoy muriendo de hambre.

Salimos del cuarto y nos vamos a la cocina a comer.

Vero: esta deliciosa - Dice con la boca llena.

Samantha: Me encanta - Digo comiendo un poco mas.

*tin ton* - Suena el timbre.

Samantha: Voy a ver quien es.

Salgo de la cocina y voy para la puerta. Cuando abro esta Homero parado con bolsas en los brazos.

Homero: En vez de estar parada, ven a ayudarme - Me dijo dándome una
bolsa para cargar.

Llevamos las bolsas a mi mesa y empezamos a hablar.

Homero: Samantha ¿Qué le paso a Vero en los brazos?

Vero: Dice que me cai.

Samantha: Mmh, si es que el estaba tratando de bajar y se resbalo de las
escaleras, pero ya esta bien.

Homero: Me parece esto muy extraño, pero como ustedes son los grandes les creeré.

Vero: Así debería de ser - Se rie.

Después de un rato de comer y hablar con mis hermanos fue hora de despedirse.

Cuando se fueron empecé a limpiar y luego me metí al baño para poder
ducharme. Cuando me estaba duchando escuchó que cierran la puerta con seguro.

"No te asustes soy yo"