Life is like a song. || Rinney

Shut Up And Drive

Get you where you wanna go, if you know what I mean
Got a ride that's smoother than a limousine
Can you handle the curves? Can you run all the lights?
If you can, baby boy, then we can go all night
'Cause I'm zero to sixty in 3.5
Baby, you got the keys
Now shut up and drive, drive, drive (drive)
Shut up and drive, drive, drive (drive)

~ Shut Up And Drive by Rihanna

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Robin y Finney estaban en el coche, con las ventanas bajadas y la brisa de la noche corriendo alrededor de ellos. Finney le dio a su novio una mirada suplicante.

"Vamos, Robin," dijo con impaciencia. "Siempre me dices que no puedo acompañarte a tus carreras. Sólo quiero ver cómo son."

Robin se llevó una mano al puente de la nariz, frustrado.

"Ya te he dicho que no es un lugar seguro para ti," respondió él, manteniendo los ojos en la carretera. "Son carreras de altos riesgos y no quiero que sufras una lesión o algo peor."

"Pero prometo que tendré cuidado," dijo Finney, tratando de hacerlo sentir culpable. "No haré nada que me pueda meter en problemas. Sólo quiero ver cómo conduces en una de esas carreras."

Robin suspiró e hizo una pausa, pensando en ello. Sabía que no iba a dejar en paz hasta que obtuviera lo que quería, así que finalmente cedió.

"Está bien," dijo con cautela, mirándolo brevemente. "Puedes acompañarme en la próxima carrera. Pero prométeme que seguirás mis reglas."

Los ojos de Finney se iluminaron y una sonrisa apareció en sus labios.

*"Lo prometo, lo prometo," dijo con entusiasmo. "Haré todo lo que digas, lo prometo."

Robin se llevó una mano al puente de la nariz de nuevo, un poco arrepentido de su decisión. Pero sabía que sería imposible retroceder ahora.

La noche de la siguiente carrera finalmente llegó. Robin estacionó el coche en el área de reunión, su nerviosismo creciente. Miró a Finney, quien estaba sentado a su lado, con una sonrisa de oreja a oreja.

"Seguro que aún quieres venir," dijo Robin, tratando de disuadirle una vez más.

"Claro que sí," dijo Finney, prácticamente rebotando en su asiento de emoción. "Estoy emocionado de ver cómo te manejas en estas carreras. Sé que vas a ser lo mejor."

Robin lo miró con una expresión un poco irritada, pero también con cariño. A veces, la confianza de Finney podía ser un poco irritante, pero también era uno de los rasgos que lo hacía aún más encantador.

"Sólo te recordaré que prometiste seguir mis reglas," dijo, empezando a salir del coche.

Finney salió tras él, casi corriendo para mantenerse al día. Su emoción era completamente visible, y su sonrisa no se desvanecía ni un poco.

"Lo haré," dijo, asegurando a Robin. "Lo prometo. Seré un ángel."

Robin lo miró con suspicacia, preguntándose si realmente lo haría. Sacudió la cabeza con resignación antes de caminar hacia donde estaban los otros conductores, preparando sus propios coches para la próxima carrera.

Vio cómo Finney miraba todos los coches con admiración, con los ojos muy abiertos por la impresion.

Unos minutos más tarde, los conductores y sus acompañantes se reunieron alrededor de un hombre al frente del grupo, quien habló con autoridad.