Life is like a song. || Rinney

Cake

I'm not a piece of cake for you to just discard
While you walk away with the frosting of my heart
So I'm takin' back what's mine
You'll miss the slice of heaven that I gave to you last night

If I am just a piece of cake
I am just a piece of cake (cake)
Then you're just a piece of meat
You're just a piece of meat to me

~ Cake by Melanie Martinez

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Finney camina por las calles de la ciudad, perdido en sus pensamientos. En su mente solo hay una pregunta constante: "¡Dios, Robin, qué diablos quieres de mí?" Hace semanas que Robin lo ha ignorado y, por más que ha intentado acercarse, él siempre lo mantiene a distancia. Finney no entiende qué está pasando y siente una creciente desesperación.

Finalmente, en un momento de frustración y coraje, decide hablar con Robin. Lo busca por todos los lugares que suelen frecuentar, hasta que lo ve sentado en un parque cercano. Con paso decidido, se acerca a él y lo confronta directamente "No me estás dando nada más que migajas, cariño". La sorpresa se dibuja en el rostro de Robin, pero él intenta mantenerse indiferente.

Finney nota la indiferencia en la reacción de su novio, y una creciente frustración se apodera de él. "Estoy harto", continúa, "Te he dado todo de mí, pero tú solo parece que te importa tu trabajo y nada más. No quiero ser solo una de tus tantas preocupaciones." Robin lo escucha en silencio, y aunque intenta mantener una expresión imperturbable, hay una sombra de culpa en sus ojos.

Finney continúa, su voz llena de ira y tristeza. "Me dices que me amas, pero tus acciones dicen lo contrario. No soy un pedazo de pastel para que lo descartes, tienes todo lo necesario excepto que me necesites". Sus propias palabras lo llenan de amargura, porque en el fondo, aún ama profundamente a Robin.

Robin lo observa en silencio, todavía luchando por mantener su distancia y su frialdad. Pero las palabras de Finney lo golpean con fuerza, y él ya no puede ocultar la culpa y el remordimiento que siente. Se pasa una mano por el cabello y suelta un suspiro frustrado, "No es tan fácil, cariño..."

"¿No es tan fácil?", repite Finney, con resentimiento en su voz. "Te he dado todo de mí, pero tú no estás dispuesto a darme lo mínimo. Siempre hay una excusa, y estoy cansado de eso." Sus ojos se llenan de lágrimas de frustración, y continúa en un tono más apasionado, "No quiero migajas de tu amor, necesito el verdadero trato. ¿O acaso no soy suficiente para ti?"

Las palabras de Finney atraviesan a Robin como un puñal. Él sabe que su novio tiene razón, que no ha dedicado el tiempo y atención que se merece. "No es que no seas suficiente", se apresura a responder, "Es que la universidad me consume, no tengo tiempo para nada más." Su intento de excusa suena débil incluso en sus propios oídos.

Finney lo escucha con una expresión de incredulidad. "Siempre es la universidad, siempre tus excusas", suelta con amargura. "Pero te lo he dicho mil veces, lo que quiero no es tu tiempo, lo que quiero es que me demuestres que me amas. Pero para ti parece tan difícil demostrarlo en palabras". Él siente que su amor y su paciencia están al límite, y que no puede soportar la indiferencia de Robin por más tiempo.

La desesperación se apodera de Robin. Él sabe que está fallando a su novio, pero le cuesta expresar sus sentimientos y necesidades. "No es fácil para mí", intenta explicar, "Nunca he sido bueno para expresar lo que siento". Pero incluso mientras habla, él sabe que no es suficiente, que sus palabras suenan vacías y que no reflejan lo que realmente siente por Finney.

Finney lo escucha, y la frustración continúa subiendo dentro de él. "No tienes que ser bueno en ello para mostrarme cuánto me amas", responde con frustración. "Sólo tienes que intentarlo. Pero lo único que haces es evitarlo, siempre evades el tema. Tu piel es caliente como un horno, tus besos son dulces y azucarados, tus dedos se sienten como algodón cuando pones tus brazos alrededor de mí, siento que me falta algo cada vez que te vas. Tenemos todos los ingredientes, excepto que me ames." Él se siente dolido y rechazado, mientras que el resentimiento empieza a ahogar su amor por Robin.

Las palabras de Finney hieren a Robin profundamente, y él se da cuenta de cuánto ha lastimado a su novio. "Lo siento", murmura, con una sinceridad desesperada en su voz. "Realmente lo siento". La culpa y el arrepentimiento llenan su corazón, y él se odia a sí mismo por haber sido tan egoísta y frío. Pero aún no sabe cómo expresar adecuadamente lo que siente, cómo mostrarle a Finney cuánto lo ama.

Finney lo escucha, con una mezcla de dolor y esperanza en sus ojos. Él todavía ama a Robin, pero se siente agotado de rogar por su atención y por un poco de afecto. "No solo quiero que digas que lo sientes", dice con un suspiro cansado, "Quiero que lo demuestres. Tienes todas las oportunidades y herramientas para hacerlo, pero no las usas." La frustración y la tristeza aún están presentes en su voz, mientras espera que Robin pueda finalmente mostrarle cuánto lo ama.

Las palabras de Finney golpean a Robin como una bofetada, y él se da cuenta de que ha estado tomándolo por sentado. Él quiere desesperadamente demostrarle su amor, pero no sabe cómo. Su mente está en blanco y siente que no tiene palabras para expresar lo que siente. Finalmente, en un intento desesperado por mostrarle a Finney cuánto se preocupa por él, Robin toma su mano, y murmura con urgencia, "Por favor, perdóname. Te amo, de verdad te amo."

Finney siente su mano siendo tomada y las palabras de Robin lo afectan profundamente. Puede ver la desesperación y el arrepentimiento en su rostro, y siente una chispa de esperanza en su corazón. Él se aferra ligeramente a la mano de Robin, pero todavía duda, aún hay reserva y dolor en sus ojos. "Eso no es suficiente", dice en un tono suave pero decidido, "Quiero más que tus palabras, quiero tus acciones, quiero sentir cuánto me amas, no solo oírlo."

Finney siente un temblor en su corazón, todavía hay una parte de él que es resistente a creer que Robin realmente va a cambiar. Sin embargo, él puede ver la determinación en los ojos de su novio y se permite albergar un poco de esperanza. "Necesito más tiempo contigo", dice en un tono suave, "Quiero sentir que soy una prioridad para ti nuevamente. Quiero sentir que no solo soy un pedazo de pastel para ti, porque si es así, entonces eres solo un pedazo de carne, eres solo un pedazo de carne para mí".

Robin escucha las palabras de Finney y siente como si le apretaran el corazón, porque se da cuenta de cuánto ha descuidado a su novio. "No, no eres sólo un pedazo de pastel para mí", responde con urgencia, "Eres el centro de mi mundo, y lo he olvidado por completo. Lo siento mucho." Sus ojos están llenos de arrepentimiento y determinación mientras promete, "Te daré todo el tiempo que necesites, te prometo que te haré sentir lo importante que eres para mí."

Finney siente una mezcla de emociones en su interior, aún hay un poco de incredulidad y miedo de volver a ser lastimado. Sin embargo, la urgencia y la determinación en las palabras de Robin lo hacen dudar. Finalmente, asiente ligeramente en señal de entendimiento y responde, "Está bien, te daré otra oportunidad, pero necesito ver un esfuerzo real de tu parte. Pido muy poco", dice en tono suave y casi resignado, "No te pido que dejes el estudio. Sólo te pido que pases tiempo conmigo, que me hagas sentir amado y no olvidado". Sus dedos se tensan ligeramente alrededor de la mano de Robin.

Robin siente cómo el alivio lo invade al escuchar las palabras de Finney. Él asiente en señal de comprensión, y sus dedos aprietan suavemente la mano de su novio. "Lo haré", promete en un tono firme y lleno de determinación. "Haré todo lo que esté en mi poder para recuperar tu confianza y hacerte sentir amado y nunca más olvidado. No te arrepentirás de darme esta oportunidad, te lo juro." Sus ojos reflejan sinceridad y anhelo mientras continúa, "Te lo compensaré, te lo demostraré cada día".

Finney siente un poco de esperanza creciendo en su corazón, y una pequeña sonrisa se asoma en sus labios. Sin embargo, todavía queda una pequeña parte de él que no puede evitar ser escéptica. "Está bien, te creeré cuando lo vea", responde en un tono más suave ahora, "Ya veré si eres capaz de cumplir tu promesa". Sus dedos siguen sosteniendo la mano de Robin, y aunque aún hay reservas en su interior, también hay un deseo de creer en la capacidad de su novio de cambiar.

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La obsesión que tengo con esta canción es tremenda.