Hermosa Casualidad

Capitulo 22

Buenas noticias

VIOLETA

Salimos de comisaría y ya me estaba sonando el móvil, abrí el bolso, cogí el móvil y atendí la llamada sin mirar quien era, en cuanto oí el grito de Emma por la otra línea del móvil, supe que tenía buena noticias... cuando me las dijo no pude pegar un grito de la emoción y se me aguaron los ojos, le dije a Emma que ahora me pasaría por el hospital, ella asintió y yo colgué la llamada

-¿todo bien Vio? *dijo denna preocupada*

-si si *me sequé las lágrimas* solo que emma me acaba de llamar diciendome que la operación de kiki ha sido un éxito

-ay cuanto me alegro de verdad *te abrace*

-que ilusión por dios *me abrazo Aitana llorando de la emoción*

-ya te digo *te seguí el abrazo*

-¿a qué estamos esperando? venga vamos, que yo tb tengo ganas de ver a la guiri *dijo denna desde lejos*

-jajajajja

—

Subimos corriendo a la segunda planta y fuimos hasta la habitación 9008, entramos y fui corriendo a abrazar a mi niña, las dos nos abrazamos llorando de la emoción y nos separamos al instante

-no sabes lo contenta que estoy de que haya salido bien, sabia que saldrias adelante y que lucharas por esto *te acaricie la mejilla con los ojos aguados*

-de saber que ahora estoy mucho mejor, es gracias a ti *sonreí*

-¿por qué?

-porque tu siempre me has animado en todo y has estado a mi lado desde el principio, te amo muchisimo Vio *te bese*

-*te seguí el beso*

-ejem... *tosio Denna y nos apartamos*

-desde luego... cortar un bonito momento así... ya te vale tia *te saque el dedo*

-yo tb te quiero pelirroja *te saque la lengua*

-bueno chicas salid un momento fuera, que el médico va a revisar a chiara un momento *dijo emma y nos salimos todas fuera*

-*estaba hablando con las chicas cuando de repente oí la voz de Emma a mis espaldas, me gire y me acerque a ella* ¿Está todo bien Emma?

-si si, nada que... solo te queria agradecer y dar las gracias por aparecer en la vida de Chiara, ella es muy especial y por lo que veo te aprecia mogollón y tu a ella, no la dejes nunca Violeta, cuidala como se merece

-no me tienes que agradecer nada Emma, su hija para mi es muy especial y la aprecio mogollón, y por supuesto que no la voy a dejar, tenemos mil planes por hacer juntas *sonreí con nostalgia*

-¿en serio? cuanto me alegro de verdad

-*sonreí*

Al rato el doctor salió de la habitación en donde se encontraba Chiara, entramos de nuevo en la habitación y fui a sentarme a su lado, me apetecía estar con ella y no soltarla nunca

-¿Qué te ha dicho el doctor?

-pues que no haga muchos esfuerzos, debido al catéter que me han puesto, y que si todo va bien esta noche, mañana por la mañana a las 12:00 me dan el alta *sonreí*

-cuanto me alegro de verdad *sonreí y te acaricie la mejilla*

-bueno chicas nosotras nos vamos, ya que mañana tenemos cosas que hacer ¿te vienes Vio? *dijo Aitana*

-no no, hoy me quedo a dormir aquí, quiero hacerle compañía *sonreí al mirarla*

-esta bien

-cuidate hija *te bese la mejilla*

-si mama, estate tranquila, estoy en buenas manos

-jajajajja

-bueno adiós chicas

-adios...

Emma, Denna y Aitana se fueron a sus respectivas casas a descansar mientras que Violeta se quedó al cuidado de kiki, no se quería separar de ella en ningún momento, quería cuidarla como se merecía

Eran las 21:48 de la noche y el hospital está super tranquilo, no había nadie merodeando por la planta ni por los pasillos, los enfermeros del turno de noche estaban en la salita viendo el partido de fútbol y no se enteraban lo que pasaba fuera

Violeta estaba tumbada al lado de su chica acariciando la mejilla, no quería dejarla nunca, no quería dejar de lado a la única chica que le ha trastornado la cabeza, que ha puesto su mundo patas arriba nada más el primer dia que se vieron en el aeropuerto, puede decirse que eso es una "hermosa casualidad" y bastante que lo era, pues estaban destinadas a encontrarse y unirse para siempre

De repente a la menorquina se le llenaron los ojos de lágrimas y Violeta se empezó a preocupar, no sabía lo que le estaba pasando... ella sin previo aviso, no dijo nada y le abrazó fuerte para que se calmara, cosa que fue en vano, la menorquina descargó toda su llorera abrazada a ella

Al rato a las dos les entró sueño, apagaron la luz y poco a poco se fueron quedando dormidas 

//A sido duro de escribir, ya que no he parado d ellorar cuando lo estaba escribiendo... :( //