III

28 4 1
                                    

—¡Au, eso duele!— chilló el de ojos verdes mientras su madre le ajustaba el corsé— Mamá, enserio ¿Tengo que usar esto? Ni siquiera es que tengamos familiares importantes

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¡Au, eso duele!— chilló el de ojos verdes mientras su madre le ajustaba el corsé— Mamá, enserio ¿Tengo que usar esto? Ni siquiera es que tengamos familiares importantes...
—Deja de hablar y quédate quieto, no voy a poder ajustarlo si te sigues moviendo.
—¡Pero esto es incómodo, ni siquiera creo que sea para tanto!
—¡No levantes la voz! Y deja de quejarte, sería mucho más fácil si tuvieras más cintura, no cuidas nada de lo que comes...

Keitaro bufó en respuesta, no era que estuviera pasado de peso, de hecho se mantenía bastante bien, sin embargo los rasgos de un omega común no eran demasiado presentes en él, no tenía mucha cintura, ni tampoco caderas demasiado anchas, en ese sentido era totalmente parecido a su familia, pues en cambio tenía la apariencia de un beta de complexión delgada, además de contar con una estatura estándar, y no una estatura más baja como lo era con Hiro.

Desde que había llegado a casa, las cosas se veían bastante agetreadas, su hermana mayor preparaba la comida, su padre arreglado y preparando la mesa, y su madre, que lo había acorralado para dejarlo "presentable".

Lo habían bañado, peinado y cambiado, con una carga de tortura en el proceso de cada paso, incluso su madre tenía el vestuario ya preparado, y Keitaro, confundido, no tuvo más remedio que soportar y callarse sus propias quejas hasta que la mujer terminara de fastidiarlo.

Esperó en la sala de hasta que todos hubieras terminado de arreglarse, jugaba con sus dedos dando vueltas por la sala de estar, pensando en qué podría ser tan importante como para que todos se comportaran como locos en el piso de arriba, de dónde escuchaba las pisadas ir y venir de los tres miembros de su familia.

—Al menos no me lo dejó tan apretado...—murmuró sintiendo el corsé debajo de las ropas.

Vestía una camisa abotonada blanca, de mangas largas, con las muñequeras y el dobles del cuello bordado con detalles en verde, rojo y dorado, formando rosas pequeñas, encima un chalequín de verde metálico y con botones dorados, el mismo también tenía detalles bordados en un verde más oscuro, pantalones y zapatos negros, y un listón delgado de color verde en el cuello, que se ataba en un pequeño moño; gracias al corsé, se le marcaba una ligera cintura que se divisaba a pesar de que el chaleco no estuviera tan pegado a su cuerpo.
Estaba demasiado arreglado para ser simplemente una reunión familiar, y se seguía preguntando cuándo fue que su madre mando a hacerle un traje así a él.

Después de unos minutos más, su hermana y su padre bajaron, vestidos a juego con el mismo color metálico que a él le habían puesto, su padre de un traje simple pero formal, con saco y chalequín puestos, la diferencia es que su traje no llevaba ningún otro detalle más allá de la corbata negra que portaba, el hombre siempre había sido de aspecto robusto, con una corta barba y lentes redondos que muchas veces ocultaba el color de sus ojos, él tenía la piel morena, al igual que su hermana y él, ella, por otra parte, era delgada, alta y esbelta, de ojos verdes y facciones delicadas, portaba una blusa abotonada de mangas largas, blanca al igual que la de él, y la falda se aseguraba en la cintura, el cuello adornado con un pequeño listón negro, aretes de oro y un peinado alto en un moño con algunos mechones sueltos de su cabello ondulado y castaño. Sencillo, y elegante, nada que los hiciera destacar demasiado a diferencia de él.

𝙴𝚕 𝚝𝚊𝚕𝚕𝚎𝚛 𝚍𝚎 𝚖𝚎𝚌𝚊́𝚗𝚒𝚌𝚊  ❦Taiga x Keitaro❦. [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora