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Vendida a $75.000

La verdad, es que.. Soy una prostituta, intentando ganar dinero para sacar a mi hermana pequeña adelante, sin dificultades y de que no le haga falta nada.

Mientras yo trabajo, ella se queda en casa de mi mejor amiga, J.

Seguí pensando sobre mi vida, una y otra vez, hasta que, cuando mi jefe habló en el micrófono me hizo salir de mis pensamientos.

Miré hacia la persona que tenía un cartel pequeño en su mano, mostrando su número.

07.

Vi como bajó el cartel, y lo dejo en la mesa en qué estaba sentado y se dirigió al escenario para tomarme en sus enormes brazos al estilo nupcial.

No pude reaccionar,
Se me hace conocido.

Él... ¿Él no es hermanastro de J?

Espera, ¡Hermanastro de J!.. ¡Que vergüenza siento ahora!, ¡¡tragame tierraaa!!

El peliblanco miraba a la morada que parecía estar mirándolo fijamente, terriblemente roja y avergonzada.

Él sonrió, pero no sabía que la pelimorada era amiga de su hermanastra.

Se fue hasta el fondo de ese largo pasillo, y al llegar a su destino, con su pie, pateó la puerta para que se abriese.

Una vez dentro, la tiró contra la cama pero no fue tan fuerte con eso.

Comenzó a besarla, haciendo que tome más reacción sobre la situación.

Uzi solo podía jadear, sintiéndose caliente.

Sintiendo como algo se frotaba contra su intimidad algo desnuda, nada más llevaba una pequeña falda que apenas cubría su parte íntima.

¿Y por la parte de arriba? Ni hablar. Parecía que tuviese una sola tela que nada más cubría sus pezones.

El alto tocaba los dos pechos redondos de la más baja, continuando aún el beso, y la pelimorada luchaba por no morirse por falta de aire.

Pero, el besaba tan bien.

Que importa que sea el hermanastro, igual el no sabe que es amiga de su hermanastra, ¿verdad?

Obvio. No lo sabe.

Volviendo al tema, el mayor ya se encontraba entre las piernas de la chica que yacía acostada sobre la cama, con sus piernas separadas siendo sujetadas por el alto.

Quien evitaba que ella cerrara las piernas, ya que se dió cuenta que era virgen.

¿Acaso era la primera vez que la vendían?

Aún así, se veía claramente que nunca le habían hecho tal cosa. Lo que estaba haciendo el peliblanco.

Hacía el trabajo de lamerle la intimidad, y estimular su clítoris, escuchando esos dulces gemidos vírgenes.

Dió una larga lamida, observando las expresiones de la chica.

Se veía extasiada, y con unas pequeñas lágrimas en los ojos por el placer. Algo nuevo para ella.

" ¡Ah!.. ¡Robo-dios!~ " Gimoteó, queriendo cerrar las piernas por el placer alto que sentía, incluso la hacía temblar.

" No cierres las piernas por más que quieras, y córrete en mi boca. " Con sus manos sujetó los muslos de la pelimorada y a la vez apretando sus muslos, siguiendo con sus lamidas en esa zona.

" ¡Nngh!~ " Con sus manos arrugó y agarró en puñado las sábanas de la cama, retorciéndose de placer llegando rápidamente a su orgasmo, el peliblanco seguía allí abajo lamiendo.

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⏰ Última actualización: Sep 09 ⏰

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Government Hooker - ★. (Nuzi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora