parte uno

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- Tags: AU, kid fic, secret identity, friends to lovers, fluff, angst, family fluff, identity reveal, smut implícito, 10k (solo este capítulo).

- Nota: Es una historia de dos partes (por ahora); Enzo nunca llegó a jugar fuera de la reserva de River (26); Julián es Spider-Man por un lado y profesor de secundaria por otro (27).


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Enzo se acordaba de cada detalle del día en que su vida cambió para siempre.

Estaba en la joda de un amigo —no se acordaba quién exactamente—, chamuyándose a un pibe, uno lindo, de pelo castaño, carita llena de pecas, ojos marrones y bien grandes a lo Bambi, bastante tímido y con un buen culo. Enzo todavía no estaba en pedo, pero estaba muy entonado y esperando que el bombonazo aceptara su invitación para ir a un lugar más privado a conocerse más de cerca.

El celular de Enzo empezó a vibrar en uno de los bolsillos de sus jeans. Con un lamento, le dijo al pibe que lo aguantara un segundo que iba al baño, así que estaba solo cuando aceptó la llamada de su hermano Sebastián.

—Espero que esto valga la pena, boludo, porque la estoy pasando bomba y no quiero que el emperador de los ortivas me lo arruine —dijo Enzo sin siquiera decir hola primero.

Hubo un silencio bastante largo antes de que la respuesta de su hermano llegara del otro lado de la línea.

Enzo, tenés que venir a casa ya mismo —dijo Sebastián.

El tono fue diferente al habitual, al igual que la manera de decir su nombre, como si algo malo hubiese pasado. Era un código que solían usar cuando algo groso estaba pasando. Enzo se quedó congelado en su lugar por unos segundos y su hermano habló de nuevo.

¿Enzo? ¿Seguís ahí?

—Ya estoy yendo —contestó Enzo antes de terminar la llamada y salir corriendo.


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Enzo estaba shockeado.

No podía dejar de mirar la pelota de sábanas adentro del carrier que rodeaba el pequeño cuerpo que dormía en ese momento. Enzo no podía entender qué estaba pasando. Estaba al borde de un ataque de pánico, eso lo sabía muy bien.

—Alguien la dejó en la puerta —explicó Marta, su mamá, rompiendo el silencio y sin dejar de mirar con curiosidad a la bebé que dormía. Sebastián murmuró algo contra su mano, abrazando más cerca a Mica, su novia, su otra mano en la pancita de cuatro meses que abultaba su ropa—. El sobre dice tu nombre.

Su mamá sabía que a Enzo le gustaban los chicos, así que ella también estaba tratando de entender cómo algo así estaba pasando. Enzo no estaba seguro de que pudiera explicárselo, no con el resultado de esa noche justo en frente de él.

Su hija.

—¿Dónde está el sobre? —preguntó Enzo, bajito, su lengua toda enredada y sus manos temblando. Su sobrina se acercó a él, ofreciéndole un sobre rosa que tenía escrito Enzo con una letra delicada y elegante. Enzo tragó saliva, agarrándola con dedos temblorosos de las manitos de la nena—. Gracias, Male hermosa.

Enzo levantó la mirada para encontrar a su mamá, su hermano y su cuñada mirándolo expectantes. Los tres estaban en pijama y su papá no estaba con ellos, porque probablemente estuviese durmiendo, siendo que los ronquidos que se escuchaban de fondo que venían desde el pasillo eran indicación suficiente. Enzo se aclaró la garganta.

bicho de ciudad » julienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora