𝓜𝓲 𝓯𝓪𝓷𝓽𝓪𝓼𝓶𝓪 ♡

𝙴𝚜𝚙𝚎𝚌𝚒𝚊𝚕 𝚞𝚗 𝚊ñ𝚘

Abrí los ojos y tardé unos minutos en poder acostumbrarme a la iluminación del lugar, pero al cabo de un tiempo lo logré. Recorrí el lugar con la mirada y me di cuenta que estaba en un hospital, tenía cables rodeándome y apenas podía moverme.

-¡Robin!-Gritó alguien y al instante reconocí la voz, apenas levanté la vista me encontré con los rulos rubios de Finney, que corrió hacia mí con la misma velocidad de un rayo. Sus brazos me envolvieron y sentí como que mi cuerpo crujiera, pero sin importar el dolor, me sentía feliz.

-Vaya, qué gusto verte, Finney.

Él se separó de mí y pude observar sus ojos claros, ahora llenos de lágrimas, apretó una de mis manos y noté que sus labios temblaban.

-Hey, tranquilo amigo, te vas a desmayar-Dije, con una pequeña sonrisa y me senté en la camilla con un quejido de dolor. A los pocos segundos alguien más cruzó la puerta, reconocí la figura de Gwen, quien rápidamente se acercó a mi.

-Perdona, le he dicho a Finney que no te moleste-Dijo lanzándole un codazo a Finney y luego dirigió sus ojos hacia mí.

-¿Cuanto tiempo llevo aquí?-Pregunté, estirando mis brazos y volteando a los lados observando la habitación, era pequeña y con las paredes blancas, la puerta estaba abierta y daba la vista hacia un pasillo con poca iluminación, había una pequeña ventana en la habitación, pero yo era el único paciente ahí.

-Una semana-Contestó al instante Finney, y de pronto mis ojos se abrieron como platos.

-¿¡Una semana!? ¿Qué pasó con el raptor? ¿Cómo me encontraron? ¿Y los otros niños?

-Robin tranquilízate, los doctores dijeron que debes mantener la calma-Dijo Gwen, acercándose a nosotros y observándome fijamente, su mirada mostraba su determinación mezclada con un toque de preocupación.

Los observé a ambos, los ojos de Finney estaban enrojecidos por las lágrimas y la expresión de Gwen se  mostraba preocupada. Pero en ese momento, lo único que pude pensar fue en ___.

-Una vecina escucho tus gritos-Dijo Finney de repente y su voz empezó a quebrarse-La policía llegó tan rápido como pudo y lograron llevarse al raptor.

-¿Y los otros niños?

Ambos se quedaron callados y se miraron entre sí.

-Los encontraron a todos-Dijo Gwen y una sonrisa se formó en mis labios.

-¿Encontraron a ___?-Pregunte, sin poder evitarlo, sentí como si mis ojos brillaran al recordar a mi querido fantasma, ___, aunque un sentimiento extraño invadió mi pecho, como de dolor, pues sabría que jamás podría volver a verla.

-Si, Robin-Respondió Finney con la voz más baja-Todos los niños estaban en un sótano que tenía el raptor en una casa vecina, enterrados. ___ estaba entre ellos, su familia está devastada.

-¿Su familia?

-Tenía una hermana menor y a su madre-Dijo Gwen acercándose a la ventana-¡Mira Finney, allá abajo hay un gato!

Finney se acercó a ella y yo me quedé en la camilla pensando en sus palabras, en la familia de ___. Recordaba su imaginen y un nudo en mi garganta se formó al recordar aquella promesa que hicimos, sabía que debía cumplirla, que debía buscar a su familia y decirles lo que ___ me pidió.

Toque el timbre de la casa de paredes azules donde me encontraba parado, era una casa bastante bonita y bien cuidada, a pesar de su aspecto viejo. Espere por algunos segundos y cuando iba a volver a tocar alguien abrió, una mujer alta y de cabello negro me recibió, observé sus facciones y por un momento pensé que era ___, pero rápidamente descarte la idea, ella estaba muerta y no volvería. Nunca.