Capitulo 4

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Era jueves y las cosas han sido tranquilas, Bryan aún no se recupera de su resfrió, ese chico nunca se enferma pero cuando lo hace, cae en cama mínimo una semana, por otro lado, cada vez falta menos para que mi muñeca rubia regrese -así le digo de cariño a Alonso es que se parece a una muñeca que tuve cuando niña- , las cosas con Jos están bien, no hemos peleado -lo cual es un avance- ha sido muy paciente conmigo y eso me gusta, que me de tiempo para adaptarme a este cambio, ahora estoy con Alicia y Kate, nos estamos organizando para mañana, como ya había dicho son las pruebas para porristas y son sumamente importantes.

- ¿Terminamos? -pregunto Kate y asentí- muy bien, entonces nos vemos mañana -

- Recuerda traer tu uniforme aparte -le recordé-

- Claro, adiós -se despidió-

- Te cuidas -dije y se fue-

- Tengo que ver a Edgar -dijo Alicia tomando sus cosas-

- ¿No vas a entrar a clase? -pregunte-

- No -dijo tranquila- vamos a ir a comer y platicar bien el plan, aparte es la última clase no pasa nada

- Bien, pero ten mucho cuidado

- Si mama -dijo como niña chiquita y reí- te hablo más tarde -me dio un beso y se fue-

- Usen condón

Le grite lo suficientemente alto para que escuchara, todos voltearon a verla y esta me levanto el dedo medió, entre risas me dirigí a mi clase, como dijo Alicia es la última gracias a Dios, llegue y me senté donde siempre, saque mi cuaderno y me puse a revisar los apuntes de la clase pasada, este maestro tiene la mala costumbre de siempre preguntarme algo.

- Que matada eres Villalpando -dijo una voz muy conocida a mi lado-

 Levante la vista y me topé con esos hermosos ojos miel que desde hace unos días no salen de mi cabeza.

- Hola Jos -le sonreí- ¿cómo estás?

- Bien -se sentó a mi lado y dio un gran suspiro-

- ¿Qué fue eso? -pregunte-

- ¿Qué cosa? -imite su suspiro y rió- ¿qué tiene?

- Te pasa algo cierto

- No es nada -lo mire exigiendo que me dijera- ok te digo -dijo rendido y sonreí triunfante- con Bryan estaba haciendo un trabaja de química

- Si, lo recuerdo

- Pues lo dejamos a la mitad y no sé cómo terminarlo, es para mañana -dijo angustiado-

- Yo te ayudo -le dije-

- ¿Enserio? -asentí- te lo agradezco mucho -dijo sonriendo de oreja a oreja-

- No es nada -le sonreí- saliendo vamos a tu casa

- Chicos atención -dijo un maestro- el profesor Estrada tuvo que retirarse temprano, así que no tendrán su clase, ya pueden salir

Todos comenzaron a festejar y salían corriendo rumbo a sus casas o a donde sea que fueran.

- Bien tenemos más tiempo -le dije a Jos-

Llegamos a su auto y como siempre me abrió la puerta, el trayecto a su casa fue consideradamente corto, llegamos y me ayudo a bajar.

- ¿No hay nadie? -le pregunte cuando entramos-

- María sigue en la universidad y mi mama está trabajando, siempre llegan tarde, así que podemos hacer lo que queramos -me miro coqueto-

- Como terminar un hermoso proyecto de química -dije y rió-

Enséñame a olvidar - Jos Canela y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora