Fragmentos de un amor olvidado [KM]

Capitulo 11: El Peso de la Culpa

La tarde caía suavemente sobre la ciudad, pintando el cielo de tonos anaranjados y violetas. La tienda había sido un caos de actividades, con los clientes yendo y viniendo constantemente. A pesar del cansancio que se reflejaba en sus rostros, Taehyung y Seokjin insistían en quedarse hasta el final.

Consciente del esfuerzo de ambos, Jimin sabía que el descanso era esencial.

—Regresen a casa, chicos —les dijo con una sonrisa—. Han hecho mucho por mí estos días, merecen descansar.

—Estamos bien, Jimin-ah —protestó Taehyung, con su voz cansada.

—No insistan —replicó Jimin—. Necesito que se tomen un descanso, ustedes también tienen vida fuera de esta tienda. Les agradezco por todo, pero deben descansar.

Finalmente, convencidos por la preocupación de Jimin, accedieron a irse.

—Está bien, pero recuerda llamarnos si algo se presenta —señaló Jin.

—Lo haré, muchas gracias —respondió feliz.

Una vez solos, cerró la tienda y se permitió unos momentos de silencio. Jungkook ayudaba a cerrar por completo la tienda, cuidando su brazo lastimado. Al darse la vuelta, encontró a Jimin sentado, su rostro reflejaba lo cansado que estaba.

Se acercó a Jimin, quien, a pesar de su cansancio, se tensó al sentir la proximidad del otro.

—Trabajaste demasiado duro —mencionó preocupado.

—Es mi deber atender este lugar —aclaró sonriente—. No le puedo dejar todo el trabajo a nuestros amigos.

Con un suspiro, se sentó cerca de él, apoyando su brazo herido sobre la mesa.

—Aun así, debes descansar —insistió Jungkook—. Ya hiciste demasiado hasta por mí, no debes esforzar tanto tu cuerpo.

Jimin mostró una sonrisa ante la preocupación de Jungkook, pero luego recordó todo el suceso con Lisa y se reincorporó. Aunque le doliera en lo más profundo de su corazón, debía alejarse de Jungkook, y no porque Lisa lo haya amenazado. Más bien, era por la misma razón de que por su culpa, Jungkook terminó herido, y ni siquiera lo recuerda.

Desvió su mirada, intentando ocultar sus sentimientos mientras se ponía de pie.

—Tienes toda la razón, debemos ir a casa —intentó escapar.

Jungkook no podía comprender cuál era la actitud de Jimin hacia él, pero se daba cuenta de que lo estaba evitando desde la mañana y no podía soportarlo. Así que decidido a obtener respuestas, se interpuso en el camino de Jimin, logrando que se sobresaltara por lo intimidante que se veía. Jungkook lo acorraló contra las mesas, mirándolo fijamente a los ojos.

—¿Qué está pasando, Jimin? —preguntó molesto—. ¿Por qué siento que me estás evitando?

Jimin tragó saliva, sentía como su corazón latía con fuerza. La cercanía de Jungkook y su intensidad lo estaban abrumando. Intentó apartar la mirada pero Jungkook no se lo permitió.

—No... no estoy evitándote —su voz tembló por la debilidad de tenerlo cerca.

—Deja de mentir, Jimin. Tal vez no recuerde quién eres, pero algo me dice que te conozco lo suficiente como para saber que algo pasa. ¿Qué es lo que me estás ocultando? —demandó, acercándose aún más.

Jimin podía sentir cómo la presión aumentaba. Quería decirle la verdad, contarle todo lo que sucedió desde el principio, sobre Lisa y su propia culpa, pero el miedo y la preocupación lo impedían.

—Jungkook, yo... —susurró, tratando de esquivarlo.

Jungkook lo veía con intensidad, buscando desesperadamente una respuesta en la mirada de Jimin. No podía soportar la idea de que algo se interpusiera entre ellos, especialmente cuando sentía que había una parte importante de su vida que no recordaba.